La sintonía fina entre Javkin y Perotti también se refleja en los números

Cuando en diciembre la Cámara de Diputados bochó el pedido de emergencia del gobernador Omar Perotti, hubo un legislador del Frente Progresista que optó por hacer rancho aparte. Quiso darle una nueva oportunidad al proyecto proponiendo enviarlo a comisiones, aunque quedó en soledad frente a la postura mayoritaria del bloque. Fue apenas un gesto, pero uno de esos que permiten entender el actual cuadro de situación de la política santafesina 

Ese diputado fue Ariel Bermúdez y responde al intendente de Rosario Pablo Javkin, quien al igual que el resto de los jefes municipales necesita hacer buenas migas con el jefe de la Casa Gris ante el delicado estado de las cuentas fiscales. Ambos se necesitan, además, para hacer causa común frente a la cláusula gatillo en los salarios estatales, la "madre de todas las batallas" que se viene en breve.

Los gestos de cortesía entre el rosarino y el rafaelino se vienen repitiendo desde antes que asumieran sus cargos y en este enero también se replicaron en los números. Rosario fue una de las beneficiadas en el reparto de aportes: la Casa Gris ya le giró $250 M del Fondo de Financiamiento Educativo (FEE) y tiene en trámite otros $720 M correspondientes a anticipos financieros.

En total, la caja que maneja el secretario de Hacienda Diego Gómez embolsará un valor cercano al costo de la masa salarial del municipio. Será por esta razón -más allá de los declamados "esfuerzos" realizados en el marco del decreto de ahorro y austeridad- que hoy el ex subsecretario de Finanzas de Jorge Obeid logra respirar algo más aliviado.

El auxilio financiero de la provincia al Palacio de los Leones fue una estrategia recurrente mientras ambas gestiones respondían al mismo signo político. La novedad que trajeron las elecciones de junio pasado planteó un signo de preguntas sobre esta cuestión.

En 2018, la ex intendenta Mónica Fein recibió del gobierno de Santa Fe $998 M en concepto de anticipos de coparticipación, cifra que se elevó a $1427 M al año siguiente. Según indicaron desde la Casa Gris, el último giro se realizó el mismo 9 de diciembre, el último día en el que Miguel Lifschitz tenía firma como gobernador de Santa Fe.

Antes de esa última acción, el socialista le concedió otro favor a su ciudad: le refinanció una deuda por $930 M, que debía ser abonada antes que finalice 2019 pero se pagará a partir de junio próximo en 12 cuotas.

Por ahora, los hechos verifican que existe buena sintonía entre Javkin y Perotti. El uno necesita del otro, pero el otro necesita del uno: en base a las presiones de los intendentes es que el gobernador confía en sacar las leyes de emergencia que en diciembre no logró. Desde la Casa Gris se muestran optimistas en lograrlo, con la estrategia de dividir los pedidos de emergencia para generar el menor ruido posible.