CCU se la juega con nuevos envases para competir con cervezas mundiales

Con el objetivo de ampliar su capacidad de logística y de profundizar el plan de desembarco de botellas propietarias en la mayoría de sus marcas más reconocidas para darle pelea a las etiquetas internacionales, la multinacional cervecera CCU planea invertir cerca de u$s20 M en la ciudad de Santa Fe, su principal centro de operaciones en Argentina.

El desembolso está integrado a un plan trianual que gestiona una partida de $500 M, para aumentar producción y generar un trascendental recambio de envases para desechar la opción genérica. “El objetivo es el de ir reconvirtiendo las líneas de envasado para llegar en unos dos años a comercializar nuestras marcas insignia en botellas que las identifiquen de manera autónoma”, explicó a punto biz Juan Pablo Barrale, gerente de Relaciones Institucionales de la compañía que entre otras fabrica y comercializa cerveza Santa Fe y Schneider.

“El objetivo es el de dejar de diferenciarnos con algunas marcas internacionales que tienen su propio diseño de botella. Queremos hacer lo propio con las marcas de origen local y hay consenso con las principales fabricas del rubro para avanzar en el proceso de recambio”, manifestó Barrale. CCU ya vende Schneider e Imperial tanto en la Capital Federal, como en el Gran Buenos Aires, en una botella particular de 1000 centímetros cúbicos, a diferencia de la tradicional de 970.

Con una pata puesta en el envasado -para ello en 2013 está previsto adquirir nuevas líneas de llenado, y comprar un stock importante de nuevas botellas-, el dinero para Santa Fe también se destinará a ampliar el centro logístico que la compañía tiene en Sauce Viejo.

“El año pasado adquirimos un predio que es nuestra base operativa para el transporte de mercadería. En él ya estamos operando y el desembolso ahora está concentrado en adquirir un equipo alemán que realiza el sorting, es decir que es capaz de clasificar botellas al sacar una foto y con un brazo robótico reconocer las diferencias de cada envase y logra agruparlos por tipo”, contó el gerente de CCU.

La planta que la compañía de origen chileno tiene en Santa Fe, es una de las procesadoras de cerveza más grandes del país y elabora alrededor de 260 M de litros al año. Además de Imperial, Schneider y Santa Fe, en el complejo fabril se producen las etiquetas de Bieckert, Palermo, y las marcas regionales Santa Fe, Córdoba y Salta.