Hidrovía, biocombustibles, Vicentin y SanCor en la era Milei

Aunque la primera semana de Javier Milei como presidente electo estuvo marcada por las marchas y contramarchas en la constitución del gabinete económico, la confirmación de Guillermo Ferraro al frente del superministro de Infraestructura anticipa un impacto fuerte para iniciativas que implican intereses santafesinos en términos productivos.

Al margen de ratificar que se pondrá en juego un esquema “a la chilena” para la concreción de infraestructura pública dando espacio para la inversión privada en la ejecución y explotación comercial de obras centrales en materia de energía y conectividad vial, hay sectores en la provincia que aguardan con expectativa el rumbo que definirá el gobierno liberal.

Cuestiones como el futuro de la hidrovía, la política orientada a los biocombustibles y la chance de salvatajes oficiales o no en causas muy caras a los sentimientos de hombres y mujeres de Santa Fe como lo son Vicentin y SanCor, parecen tener un destino signado.

Hidrovía

Si bien fue Alberto Fernández el que prometió continuar lo que Macri dejó inconcluso y avanzar en una licitación internacional que permitiera sentar las bases para una nueva administración para la Vía Navegable Troncal (VNT) Paraná-Paraguay, el cierre del contrato de la UTE Hidrovía SA en septiembre de 2021 derivó en que la gestión del canal pase a la órbita estatal bajo el paraguas de la Administración General de Puertos (AGP). Si bien desde el nuevo gobierno no hay datos claros, actores vinculados al sector empresario aseguran que el esquema vigente sostenido en contratos directos con la belga Jan de Nul y la argentina Emepa -los mismos que en su momento conformaban la UTE- parece que está signado a fenecer.

Las terminales agroexportadoras que operan granos en el upriver se atreven a anticipar que tras el recambio de autoridades finalmente sí se optará por la gestación de una licitación privada a la que le sobrevendrá una breve discusión sobre los términos del trámite. Atendiendo a que el gabinete de Milei está fuertemente influenciado por referentes ligados al macrismo, el empresariado insiste en la probabilidad de que se desempolven los viejos pliegos que Guillermo Dietrich -ministro de Transporte durante el Gobierno de Cambiemos- había llegado a producir.

Aunque aguardan a la asunción presidencial para expresarse con más énfasis, actores muy vinculados a la dinámica agroexportadora se apalancan también en el punteo que arrimaron a Nación entidades como la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) y la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC) sobre un estudio encargado a la consultora LatinoConsult que llegó en la etapa final del gobierno de Macri y fue reenviado al primer titular de la cartera de Transporte que tuvo Alberto Fernández tras su jura: el fallecido Mario Meoni.

“Para mí hay que hacer una licitación transparente, de modo que puedan competir no solo las firmas que integraron durante tres décadas la UTE que se hizo cargo de la hidrovía, también otras empresas que se quedaron afuera en la licitación internacional de los años ‘90”, apuntó Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara de Puertos Privados Comerciales, en contacto con Punto biz.

Más allá de la confesa distancia que Milei dice tener con el gobierno chino, desde el ámbito empresario insisten en que la compulsa debería contar incluso con la evaluación de una eventual propuesta de algún consorcio oriental, dada la experiencia que acumulan. Casi dando por sentado que lo que se viene será una hidrovía administrada por privados, Zubizarreta incluso deslizó que “pueda haber más de una empresa trabajando para que no se genere una dependencia a una sola firma”.

Habrá que observar también cómo se acomodan los mecanismos de control sobre lls adjudicatarios del canal luego de la experiencia de la creación del Ente de Control de la Vía Navegable Troncal (Ecovina). La repartición, nacida por decreto y de la que participan las provincias con ribera sobre los ríos Paraná y Paraguay, no logró siquiera avanzar en el armado de los pliegos en medio de las contramarchas que expuso el ejecutivo nacional sobre la Hidrovía. 

Biocombustibles

El propio Zubizarreta, como represente de terminales agroexportadoras, preside la Cámara de Biocombustibles ,que aglutina a grandes empresas dedicadas no solo al envío de granos al exterior, muchas de esas compañías hoy tienen capacidad ociosa para la producción de biodiesel por estar desplazadas del negocio a nivel local a partir de una normativa que se renovó bajo la gestión de Alberto Fernández y que le da relevancia a las pymes productoras no solo de biodiesel de soja, también las dedicadas al bioetanol de maíz y de caña.

“Ojalá que se pueda enviar una nueva Ley al COngreso que regule un corte creciente que vaya reemplazando a los combustibles fósiles como pasa en cualquier sitios del mundo que permita un impacto ambiental positivo pero que por el otro lado haga compartir por igual a a todos los jugadores del mercado para que el consumidor compre lo más barato posible y para que las refinadoras de nafta y gasoil pueda decidir a quién le compra y a qué precio y que esa puja de mercado sea virtuosa”, expuso Zubizarreta.

Claro, en el medio están las pymes productoras de biocombustibles, muy beneficiadas con la prerrogativa vigente. “Ocurre algo muy singular. Acá tenemos las mejores plantas de biocombustibles del mundo, las más integradas, las más eficientes, las que pueden operar con menor costo y son esas las que tienen capacidad ociosa. Tenemos que migrar hacia un modelo donde haya un estímulo a las empresas chicas que las obligue a integrarse, una especie de handicap como ocurre en el deporte que se vaya corriendo con el transcurso del tiempo para que todas las compañías terminan compitiendo por una tajada del mercado”, mencionó el titular de la Cámara.

Vicentin y SanCor

En ambas empresas hay elementos en común. La dedicada a la agroexportación llegó a una instancia concursal que la dejó al borde del cramdown y desde el entorno ligado a la compañía que busca que un tribunal de cámara rechace precisamente esa figura y restaure la salida del acuerdo de pagos a 12 años que aglutina a tres compañías como interesadas estratégicas, el nuevo gobierno de corte liberal las estimula.

Es que los planes de salvataje externo que contempla el cramdown y que define que pueda presentarse un actor ajeno a la concursada Vicentin para ofrecer liquidar las deudas y explotar los activos parecen que siempre han dependido de financiamiento público -ya sea a través del Banco Nación o el Bice-. Bajo la tesis de un Gobierno como el de Milei que buscará evitar desembolsar fondos estatales en el capital privado la chance del cramdown se diluye. Igual la que tendrá la última palabra es la Cámara de Apelaciones a la que recurrió el directorio de la firma con base en el norte santafesino para que se revea el fallo de primera instancia que rechazó el acuerdo de pago oportunamente presentado por Vicentin.

Con SanCor pasa lo mismo, es que el futuro de la cooperativa láctea depende casi exclusivamente de un fideicomiso privado timoneado por el estudio jurídico rosario Casanova, Mattos & Salvatierra, que antes del balotaje estaba casi listo para acceder al mercado de capitales.

Dicho fideicomiso es una figura que depende de aportes nacionales pero desde la conducción de la cooperativa hoy virtualmente lo dan por caído frente a las definiciones de Milei en la previa de la asunción. 

La semana pasada desde el estudio jurídico insistieron en que la figura del salvataje no estaba fuera de juego y de hecho cursaron una demanda contra la cooperativa por haber incumplido los términos del acuerdo que indicaba que iban a dar luz verde para la salida al mercado. Los cooperativistas que conducen la compañía quieren que primero aparezcan los fondos que pongan en marcha a la cooperativa sin poner en riesgo el capital de la empresa.