Biotecnológica habilita planta piloto pionera en Sudamérica

La firma Apolo Biotech viene creciendo sin pausa en su base de Santa Fe como estrategia para dar respuesta al plan que se propusieron desde el incio: crear formulados que sean capaces de contener moléculas de ARN para aplicarlos en cultivos y así lograr resultados específicos contra hongos, insectos o determinado virus sin emplear fitosanitarios de amplio espectro. En ese objetivo la semana que viene cortan cintas de una planta piloto inédita en América Latina.

“Hay una planta que trabaja con ARN para vacunas en México y para 2026 está el proyecto de poner en marcha una similar en Argentina. Pero una planta piloto que se dedique a escalar ARN para vegetales es la primera en el hemisferio sur por lo que se trata de un doble mérito para una empresa pequeña como la nuestra”, expresó Matías Badano, uno de los socios de Apolo, en contacto con Punto biz.

La inversión está alojada en el Parque Tecnológico Litoral Centro (PTLC) en la capital provincial, donde la compañía tiene ahora sus cuarteles centrales. “Adquirimos contenedores y armamos un laboratorio y depósito de 120 m2 al que le sumamos otros 60 m2 de espacio que le alquilamos al Parque en un sector anexo. Hace un tiempo venimos operando allí y ahora coronamos el esfuerzo realizado con la puesta en marcha de la planta piloto que nos va a posibilitar ir probando la tecnología en mayores proporciones, instancia fundamental para pensar en una salida comercial de nuestras fórmulas”, añadió el referente.

Apolo Biotech fue creada por el biotecnólogo santafesino Federico Ariel, premiado por la Unesco el año pasado. El plan de crecimiento de la compañía se basa en el desarrollo de moléculas orgánicas para el cultivo orgánico de alimentos. La nueva planta piloto permitirá profundizar en las experimentaciones para abaratar el costo de la tecnología y saltar así de los trabajos hechos sobre cultivos intensivos a cultivos extensivos.

“La planta está basada en tecnología propietaria de Apolo Biotech. Básicamente lo que logramos después de 10 años de investigación y desarrollo trabajando con moléculas de ARN logramos estabilizarlas con todas las pruebas de campo hechas. Ahora veníamos necesitando empezar a escalar bajando el precio de emplear el procedimiento y generando así más volumen. En esa línea de acción nos encontramos”, puntualizó Badano.