Trajo un horno de histórica pizzería porteña y abre un bodegón en Rosario

Pizza al estilo porteño pero con impronta rosarina. Un bodegón de esos donde el mozo conoce de memoria a su clientela y le sirve "lo de siempre". Un espacio cálido y familiar pero a la vez moderno y con tragos y coctelería de autor. En todo esto pensó Diego Prince cuando encaró el proyecto de montar "La Rosario, bodegón de pizzas" en la esquina de 9 de Julio y Santiago.

“Es una clásica pizzería de pizza al molde, tradicional, estilo porteña. Pero tiene una temática que refiere a la ciudad, con imágenes dentro del local que remiten a Rosario y su historia. Además, el producto y sus ingredientes son locales y el pizzero es de acá”, explicó a Punto biz Diego Prince, administrador de La Rosario, que abre al público este miércoles 4 de enero en el corazón del barrio Lourdes. El bodegón tendrá la mística de las tradicionales pizzerías de Buenos Aires, a tal punto que Prince hizo traer un horno que funcionó durante 50 años en uno de los locales de Banchero, histórica pizzería porteña con sucursales en Avenida Corrientes y La Boca.

El lugar estará aggiornado a los tiempos que corren y contará también con coctelería de autor, tragos y happy hour como ocurre también en los “peso pesado” del rubro como Guerrín y Kentucky. “El local es una casa antigua con detalles modernos, atención en barra y buena iluminación. Y en cuanto al producto nos diferenciamos por la calidad de la masa y la mercadería”, apuntó Prince sobre la oferta de La Rosarina que también incluirá cazuelas, empanadas, picadas, el tradicional carlito y menús especiales. Como no podía ser de otra manera, acompañará la cerveza, tirada y en botella. 

Aunque La Rosario debuta en 2023, no será la primera experiencia de Diego Prince en el barrio ya que durante seis años timoneó un proyecto similar en la esquina de Alvear y 9 de Julio, a una cuadra de donde hoy vuelve a instalarse. Sin embargo, por problemas edilicios de aquella propiedad, los dueños no le renovaron el contrato y debió dejar una pizzería que había alcanzado mucha fama. A poco más de un año del cierre, vuelve a la carga con un bodegón de pizzas renovado.

La Rosario está emplazada en una casa de 80 años de antigüedad que fue reacondicionada, manteniendo su estilo pero con una propuesta más acorde a los tiempos y detalles modernos. Tiene un espacio de 130 metros de vereda, salón con mesas y la posibilidad de comer en la barra, como en las clásicas pizzerías porteñas.