Le devuelven el brillo a histórico inmueble con un negocio que va a sonar bien

El histórico inmueble de Maipú 555 donde supieron funcionar diferentes propuestas gastronómicas volvió a vestirse para salir a escena. Cuatro amigos fanáticos de la música decidieron juntarse y, tras encarar una profunda refuncionalización centrada sobre todo en la estética y la acústica, le dieron vida a Feuer y piensan cortar cintas en diciembre próximo.

"Este es nuestro primer emprendimiento juntos y lo encaramos desde las ganas que teníamos individualmente de realizar un proyecto de este tipo. Cada uno de nosotros tiene otras actividades en areas diferentes, pero al tener en común la fascinación por la música y por la gastronomía decidimos unir fuerzas y llevar esta idea adelante, en la que cada uno cumple un rol bien marcado", contaron en diálogo con Punto biz.

Victoria Rasia, Fernando Gonzalez, Martin Capella y Mariano Marcial Pérez son amigos desde hace mucho tiempo y todos vienen de diferentes rubros como el diseño gráfico y comunicación, gastronomía, administración de empresas y comercio, arte y entretenimiento. En Feuer cada uno se encarga de su área.

"Al estar pensada por y para amantes de la gastronomía y de la música, decidimos plantear dos propuestas diferenciadas. Durante el día y de Lunes a Viernes, restaurant. Y por las noches bar, de miércoles a domingo. Hicimos especial hincapié en el confort acústico del espacio y seleccionamos estrictamente varias listas con la música que creemos especial para acompañar cada momento. También contaremos con presentaciones de DJs y bandas", agregaron.

El diseño del espacio estuvo a cargo del estudio Alonso Del Castillo Arquitectos, responsables de la estética de varios emprendimientos como Churrasquería, Heladerías Américo y el reciente re-styling de Chinchibira, entre otros.

"El local es un edificio emblemático de la ciudad y está en una de las calles mas pintorescas, es un espacio con el potencial indicado para desarrollar nuestra idea y cuando vimos que no estaba en funcionamiento no dudamos en contactar a los propietarios", contaron sobre cómo pensaron en ese inmueble.

"Somos conscientes de que en donde algunos escuchan música otros escuchan ruidos molestos y de la sensible situación entre este tipo de propuestas y su convivencia vecinal. Por esto, al mismo tiempo que decidimos contratar a Nico Del Castillo y Tomás Alonso para el layout y estética del negocio, también contratamos a Guillermo Palena, ingeniero acústico responsable de algunos de los mejores lugares con insonorización y acústica de la ciudad. Él nos asesoró en la construcción de un espacio con las características que necesitábamos y hará un seguimiento durante el funcionamiento del lugar. Por otro lado la técnica está a cargo de Ecpro que aportó el sistema de sonido con la calidad adecuada", comentaron.

Cuando ficharon el lugar, ya estaba siendo refaccionado y se realizaron trabajos de puesta en valor.  "Dentro del espacio se hicieron pocas intervenciones estructurales: re ubicamos una escalera que condicionaba el espacio principal y se pensaron tres zonas bien definidas; el sector del contacto con la calle funcionará como restaurant, con mesas y sillas convencionales. La barra dispuesta a modo de isla en el medio del local junto a un banco corrido con mesas bajas en el lateral, serán usados tanto para cena o coctelería, y por último, el sector posterior, una sala polivalente que busca adaptarse a diferentes demandas, desde eventos privados a shows en vivo o como extensión del espacio principal", describieron.