Marca rosarina de cerveza artesanal invirtió para quintuplicar su producción

El empleado bancario Emanuel Frenda soñaba con tener su negocio de cerveza artesanal desde que terminó la escuela. Con ayuda de su amigo de la infancia Fernando Ciancia pudo concretar ese sueño y juntos crearon Santa Diabla. Hoy lo que empezó como un hobby hace cinco años, dio un salto productivo con nuevos equipamientos de acero inoxidable que le permitirán a la marca fabricar 800 litros por cada “cocción”.

El desembolso fue posible gracias a un crédito con tasa diferencial del banco de Santa Fe. El caso es uno de los tantos que se dieron durante un periodo en el cual el emprendimiento cervecero se convirtió en el objetivo de muchos emprendedores. Si algo caracterizó a la movida gastronómica de la Cuna de la Bandera en el último tiempo fue la apertura de bares cerveceros, creación de marcas de cerveza artesanal e incluso la llegada de grandes de afuera como Patagonia, Peñón del Águila y Antares.

Lo que resalta a Santa Diabla frente a otros emprendimientos cerveceros es el nivel de crecimiento. Ambos amigos decidieron crear el negocio hace cinco años y luego de pasar dos capacitándose y tomando cursos sobre cómo elaborar un producto de calidad lanzaron su marca hace sólo tres años.

Los primeros clientes y catadores de Santa Diabla fueron amigos y parientes de Fernando y Emanuel pero luego de recibir un feedbakc positivo comenzaron a comercializar el producto. “Arrancamos hace tres años como hooby y actualmente somos proveedores de siete bares, contamos con cuatro variedades de cerveza y pasamos de elaborar 150 litros por cocción a 750 con el equipo nuevo”, comentó Emanuel a punto biz.

Actualmente las variedades que producen son Golden Ale, Triple A, American IPA, Porter y algunas cervezas de estación más experimentales utilizando ingredientes poco convencionales. Los socios esperan que un día la elaboración de cerveza artesanal sea su única actividad económica y no descartan abrir su propio bar cervecero aunque por el momento todavía lo ven lejano.