"El nuevo dólar agro pone en riesgo a las actividades que transforman el maíz"

Santa Fe es una de las provincias más golpeadas por la sequía. La falta de lluvias y las heladas a destiempo pegaron fuerte: se redujo la producción de cultivos y pasturas, influyó en la disponibilidad de forraje, se perdió ganado y dejó al productor recalculando. 

Durante el desayuno del que participó Punto biz con el Ministro de Producción, Ciencia y Tecnología Daniel Costamagna, el hilo conductor fue el campo: dólar agro, impacto de la sequía, endeudamiento de los productores y nuevas líneas de financiamiento del Banco de Santa Fe. 

“El sector está endeudado. Muchos productores están refinanciando la deuda por la cosecha gruesa que fracasó, pero también financian capital de trabajo para la nueva cosecha”, refirió Costamagna. Y remarcó que el 70% de las explotaciones en Santa Fe son arrendadas y que a quien hay que ayudar es al productor. “Tenemos que brindar estímulos al productor para que genere trabajo e invierta en la provincia”, enfatizó. Sobre el nuevo dólar agro, sentó postura: “Es un error, creo que se pone en riesgo a muchas actividades que transforman el maíz como el caso de la agricultura, la producción porcina, tambera y ganadera”.

En el marco de la emergencia agropecuaria, desde la cartera que lidera lanzaron créditos con tasa bonificada (54,5%) por $5.000 M. La línea tiene un monto de hasta $3 M por productor, con un plazo de 18 meses y 6 meses de gracia. “Esta herramienta de acompañamiento se diseñó de acuerdo al diálogo mantenido con los productores y en articulación con las distintas instituciones del sector”, puntualizó el funcionario. De este modo, el gobierno lleva implementados tres programas de crédito de emergencia agropecuaria por un monto total de $8.500 M.

Costamagna hizo hincapié en que Santa Fe administró distintos apoyos económicos y financieros para dar respuestas concretas a las demandas de los productores, incluyendo a sectores como el apícola y el legumbrero. Un capítulo aparte merece la ganadería: “Uno de los sectores más resentidos fue el ganadero y se va a trasladar hasta el primer semestre de 2024. Hay 100.000 terneros menos, lo que se traduce en 100.000 novillos menos”. 

En los campos profundos de Santa Fe, las vacas morían al igual que sus terneros que no habían cumplido con el destete por la falta de pasto verde y la deficiencia de agua potable. 

Proyecto de ley en danza 

Otro de los ejes en los que puntualizó Costamagna fue en el proyecto de ley de caminos rurales. “Buscamos que trascienda la gestión”, precisó. Es que tiene un anclaje tripartito: producción, educación y boleto educativo rural. El programa persigue como objetivo conformar un sistema de asistencia técnica y económica que permita la incorporación de infraestructura productiva, con prioridad en la ejecución de mejorado y el mantenimiento de los caminos rurales mediante el diseño de trazas prioritarias desde lo productivo y la educación rural.