Impulsan proyecto para levantar una torre de 35 metros frente al río

El Concejo Municipal empezará a tratar un pedido del Ejecutivo para autorizar un nuevo desarrollo inmobiliario en el frente costero del bajo rosarino. Se trata del expediente asociado a un terreno sobre Av. Belgrano 548, donde los propietarios proponen construir una torre de 35,10 metros de altura (planta baja más 11 pisos) detrás de una vivienda patrimonial catalogada con grado de protección 2b. 

El proyecto ingresó a principios de diciembre mediante el Mensaje 152/25, y lleva la firma del estudio de arquitectura Lovera Lufft, eleva la solicitud de viabilidad patrimonial y habilita a los concejales a evaluar la posibilidad de firmar un convenio urbanístico. Esta figura es la que permite sumar edificabilidad en inmuebles protegidos a cambio de la preservación integral de la fachada y los elementos históricos.

Según la documentación técnica, que incluye relevamientos, planos y dictámenes del Programa de Preservación del Patrimonio, la intervención propone:

* Restaurar la casona existente, respetando fachada, ornamentaciones, carpinterías y la escalera original.

* Demoler volúmenes agregados sin valor arquitectónico.

* Reconvertir los ambientes de planta alta en oficinas o consultorios.

* Construir un edificio de viviendas recedido 4,5 metros de la línea municipal para no competir visualmente con la casa histórica.

* Mantener una fachada “neutra” en el volumen nuevo, buscando destacar la arquitectura antigua.

Los arquitectos responsables sostienen que la casa está hoy deshabitada, vandalizada y con riesgos de intrusión, y que sin un desarrollo inmobiliario que haga viable su restauración seguiría deteriorándose. Los propietarios incluso remitieron una nota al Concejo relatando varios episodios de usurpación, algunos ocurridos durante actos oficiales en el edificio lindero.

El nudo del debate: la altura

El punto más sensible es la excepción en altura. Para esa cuadra de Av. Belgrano, la normativa general fija un máximo de 25 metros (PB + 8). Sin embargo, el proyecto solicita 35,1 metros, argumentando que el retiro para preservar la casa, la necesidad de dos ascensores, la escalera presurizada y los patios reglamentarios no permiten un edificio más bajo.

La manzana, además, ya cuenta con antecedentes: en la esquina de Belgrano y Buenos Aires existe un edificio de 45 metros, habilitado previo a las regulaciones actuales. 

El concejal Fabrizio Fiatti, integrante de la Comisión de Planeamiento, explicó que el expediente no implica descatalogar el inmueble, sino autorizar un convenio que permita sumar edificabilidad garantizando la preservación. “La figura del convenio es la que permite sumar edificabilidad en un inmueble que está protegido. Las reglas del proyecto deben asegurar conservar y sostener visualmente lo antiguo en un lugar jerárquico”, señaló Fiatti. 

En tanto, respecto del planteo de altura, el edil consideró que la propuesta es atendible. “Piden 35 metros, que equivalen a PB + 11. Para el frente costero es bajo ya que hay edificios mucho más altos. En esa misma manzana hay uno de 45 metros. La altura general es de 25 metros, pero al estar frente a un parque y a una avenida ancha, y teniendo en cuenta que no hay otros proyectos en la cuadra, nos parece un pedido razonable”, analizó. 

El expediente comenzará a debatirse el lunes en la reunión de la comisión de Planeamiento. El Concejo deberá definir si avala la excepción y autoriza -en la última sesión del 18 de diciembre- al Ejecutivo a firmar el convenio patrimonial. Si eso ocurre, los desarrolladores podrán avanzar con el proyecto definitivo y, luego, con el pedido de permiso de edificación.