Gastronómicos le huyen a la licitación clave para reactivar el centro

La apuesta fuerte que tenía la Intendencia para reactivar el centro de Rosario entró en zona de turbulencias. Sin firmes interesados a la vista, la licitación del llamado Mercado del Centro (San Martín y San Luis) fue prorrogada por segunda vez en el año y pese a los esfuerzos de la Municipalidad de atraer inversores, la iniciativa no despierta entusiasmo. Según los empresarios gastronómicos consultados por Punto biz, la razón del fracaso es clara: la inversión que hay que hacer para poner a nuevo el predio es muy grande y el riesgo también.   

Es que para armar el Mercado del Centro, es condición excluyente remodelar parte de la infraestructura del complejo Fontanarrosa, en la plaza Montenegro, el bar Avelino y construir de cero espacio para entre cuatro y siete locales gastronómicos. La obra reportaría una inversión cercana a los $60 M, la cual corre por cuenta del privado que gane la licitación y no del Estado municipal. Desde que lanzó el llamado, a principios del mes de enero, la Intendencia sentó a la mesa a diferentes operadores del rubro para proponerles sumarse al emprendimiento comercial, pero si bien hubo interés por el proyecto, cuando llega el momento de hablar de números, a nadie le cierra la ecuación.  

“Parece más una propuesta inmobiliaria que gastronómica. Por el tamaño de la inversión que hay que hacer le puede interesar a una constructora que gane y tercerice el negocio, pero para un gastronómico es muy difícil”, explicó a Punto biz Carlos Mellano, presidente de la Asociación Hotelero Gastronómica de Rosario. El ítem de la inversión aleja a empresarios de unos de los sectores más golpeados por la pandemia y al que todavía le cuesta levantarse. Entienden además, que teniendo en cuenta el contexto económico y social, apostar por una zona como la de San Martín y San Luis, -en estado de franco abandono en el centro de Rosario- es una jugada de alto riesgo.

“Estudiamos la posibilidad porque el proyecto es interesante pero la inversión es grande y en esta etapa no la vemos viable”, apuntó Reinaldo Bacigalupo, al frente de Grupo 83, uno de las empresas gastronómicas más activas de Rosario, que administra bares y franquicias como Tea Connection, El Club de la Milanesa y Ronnie, entre otras. El grupo rosarino llegó incluso a cotizar los trabajos de reforma en alrededor de u$s250.000 pero desistió de la propuesta para enfocarse en otros proyectos. Para Bacigalupo, el acceso a créditos que permitieran financiar la obra podría abrir el camino para que se presenten interesados. 

Esta fórmula de concesión va a contramano con lo que planteó el intendente Pablo Javkin al comienzo de su gestión, pretendiendo dar una vuelta de página a los múltiples intentos de licitación fallidos del período de administración socialista: “La Intendencia se hará cargo de las obras y luego los concesionarios deberán pagar el canon correspondiente” 

Sólo un grupo compró el pliego de la licitación pero, vencido el plazo formal de presentaciones de la primera prórroga (el pasado viernes 22 de abril), no cursó ninguna oferta por la concesión del espacio. Según trascendió, Asgar, grupo gastronómico de ascendente trayectoria en la ciudad, emitió el ticket de pago del pliego licitatorio pero decidió no presentar una oferta para explotar el negocio y tampoco lo hará en el segundo plazo extendido que habilitó el Municipio. 

A los interesados, además de exigirle un patrimonio neto mayor a $28 M, se le exige el pago de un cánon mínimo de $110.000. Según el pliego, funcionarán bajo la lógica de un patio de comidas, es decir, compartiendo la superficie para mesas y sillas (hasta 350 m2, tanto internos como externos). Pero el punto que genera polémica es el la inversión que se le exige al privado para remodelar el predio y construir los locales comerciales. “Calculamos un estimativo en base a distintos factores, que está en torno a los $30 M más otros $10 M para la ejecución de una terraza verde. Es un número aproximado y cada privado puede hacer el suyo. Creemos que hay empresarios gastronómicos que están en condiciones de invertir a esa escala, y de hecho hubo varios interesados”, apuntó Rogelio Biazzi, coordinador de Gabinete de la Municipalidad de Rosario. 

El Mercado del Centro apuesta a ser una marca de la gestión oficial en el intento de dinamizar la actividad en el centro. De hecho, la licitación lanzada a principios de este año se enmarca dentro del plan de revitalización del área, en el que se incluyen la actual remodelación de la peatonal San Martín, la realización de la "noche de las peatonales" y las intervenciones sobre calle San Luis. 

Más allá de las intenciones municipales, quedan muchos puntos ríspidos en la agenda. El secretario de Producción, Sabastián Chale, dijo en declaraciones a Base de Datos (Meridiano FM 107.1) que la Intendencia está dispuesta a redefinir estrategias. A modo de ejemplo, se pueden apuntar dos casos en concreto: 

# Grandes edificios permanecen a medio construir desde hace años por la calle San Juan. En particular uno que proponía hotelería + gastronomía frente a la plaza, y mientras tanto cerraron todos los hoteles preexistentes en la misma manzana. Otros edificios avanzaron a lo largo de la misma arteria, pero el lugar clave está lleno de tapiales con carteles que se ponen para evitar intrusiones.   

# Comerciantes de calle Sarmiento al 900 cuestionan que sus clientes quedaron sin lugar para estacionar, cuando en centros comerciales barriales se está permitiendo estacionar en ambas manos. Relatan que un efecto pobreza sacude a todos los puntos de ventas y también cuestionan que esa cuadra no estaba incluida en el proyecto de circuito histórico que autorizó el Concejo. Amenazan con ir a juicio.