Startup salta del corral al tambo y amplía soluciones para la ganadería

La firma Dale Vaquita -startup que ya tiene algunos años de recorrido en la automatización de la gestión del ganado- compite en un sector en donde la tecnología le permitió a varios jugadores generar soluciones para una tarea que venía siendo casi artesanal. Lo cierto es que la firma basada en Sauce Viejo ahora está dando un salto estratégico. Se mete en la operación de tambos, área con la que buscan integrar aún más las soluciones que aportan a la ganadería.

Nacida como un proyecto en el marco de un tesis de grado académica, la realidad le permitió rápidamente a los fundadores empezar a desarrollar herramientas tanto en software como en hardware para digitalizar datos centrales en tiempo real. “Hoy tenemos un lector de caravanas que está basado en un diseño de manga que posibilita que el operador esté con sus dos manos liberadas para otras tareas, una balanza para hacienda, un apartador automático y una app para la gestión de toda la información relevada”, enumeró Joaquín Pérez, el ingeniero electricista que diseñó el modelo de negocio que terminó completando con su padre, Edgardo Peréz, productor agropecuario con años de campo encima.

Pero al margen de los gadgets que los hicieron ganar posiciones en el negocio de la innovación asociada a la ganadería, ahora van por más. “La novedad es que estamos dando el salto a la automatización de tambos, una solución en la que veníamos trabajando y que ahora se plasma con un primer negocio”, expuso Joaquín, en contacto con Punto biz. “Hasta ahora nosotros veníamos operando en soluciones integradas pero para la cría de bovinos, el hecho de desembarcar en un sistema de ordeñe complejiza más nuestra tarea, pero al mismo tiempo nos posiciona como prestadores de servicio ya que nos ocupamos del mantenimiento de todo el paquete de herramientas digitales que estamos instalando”, sumó el socio sobre lo que se viene.

“Entendemos que hay que migrar hacia soluciones aún más integrales y equipar por completo un tambo en el manejo de sus animales nos hace dar un paso adelante. Hacia eso vamos”, indicó Pérez. Como otras firmas dedicadas a la tecnología vinculada a la actividad agropecuaria, la historia de Dale Vaquita fue la de un período de subsistencia durante lo más severo de la sequía. 

“Ahora estamos esperando por la recuperación del negocio estuvo muy afectado por la sequía que también redujo inversiones en el ámbito ganadero. Pero de cara al segundo semestre las expectativas son buenas, luego de un período donde el criador lo que hizo fue relegar la aplicación de tecnología”, reflexionó el ingeniero.