"Quiero cambiarles la vida a los productores como mi viejo"

Punto biz festejó sus primeros 20 años con la realización de un documental, dirigido por el reconocido Héctor “Nene” Molina, que repasa en relatos la experiencia de 20 empresarios y emprendedores que marcaron el rumbo de los negocios en estas dos décadas. En esta oportunidad, Juan Manuel Baruffaldi, CEO de Deep Agro, comparte su visión sobre la tecnología y el futuro que queda por delante. Mirá el video.

“Soy un emprendedor con vocación de cambiar el mundo, de triple impacto, de sustentabilidad y de generar un cambio positivo en el mundo”, así se presenta Juan Manuel Baruffaldi, Ceo de Deep Agro, la start up que tiene el objetivo de generar modelos disruptivos para mejorar la calidad de vida del productor agropecuario aplicando ciencia, tecnología y diseño y preservando el medio ambiente.

“Es tratar de generar un cambio positivo en el mundo, y poner al servicio todo el aprendizaje que tenemos desarrollado, creando soluciones o productos que generen impacto social, ambiental y económico y que le cambien la vida a alguien”, agrega el joven de 31 años, licenciado en ciencias de la computación, egresado de la UNR, y que se especializó en inteligencia artificial y negocios con posgrados en Rosario y Buenos Aires.

Junto a cuatro amigos, ahora socios, fundó en 2017 la empresa Deep Agro con la cual lograron, por medio de la inteligencia artificial, cambiar la forma en la cual el productor agropecuario aplica productos químicos en el campo. Crearon un sistema inteligente para detectar malezas y realizar aplicación selectiva de herbicidas, tanto en barbecho, sin presencia de cultivo, como dentro del cultivo.

Al aplicarlo de forma selectiva, la reducción de costos puede variar entre un 70 y 90%. Y desde el punto de vista del cuidado del medio ambiente, se reduce el impacto ambiental medido en índice EIQ (Cociente de Impacto Ambiental) por el simple hecho de que estás aplicando menos volumen”.

Con el campo en la sangre

Baruffaldi es oriundo de Casilda y viene de familia agropecuaria. Después de años en el campo viviendo los problemas que se presentaban logró poner en práctica la inteligencia artificial en el lugar donde creció, generando soluciones “que le cambien la vida a productores agropecuarios como mi viejo”. La solución hoy está disponible para productores de cualquier tamaño en toda la Argentina, Uruguay y próximamente aspiran instalarse en Brasil.

El socio mayor del Mercosur se impone como elección por su tamaño y por la oportunidad de negocio. Hoy el producto funciona para soja y maíz, pero ya están trabajando en una solución para el cultivo de caña de azúcar. Baruffaldi afirma que en Argentina los productores adoptan de manera rápida la tecnología, por eso se enfocan en “tener una propuesta de valor para otros mercados mucho más eficiente y acorde a la necesidades que presentan”.

Un futuro por delante

“Deep Agro es una compañía de inteligencia artificial y estamos haciendo ciencia en inteligencia artificial como pocas compañías en Argentina. Hoy tenemos un producto estrella, que es tecnología de aplicación selectiva, pero la gran particularidad que tenemos es que manejamos muy bien tecnologías que hoy están en auge, y lo aplicamos en imagen y video para resolver distintas problemáticas del agro y Argentina, es pionera a nivel global. Además generamos un muy buen espacio para que científicos, emprendedores, estudiantes o profesionales de la ciencia de la computación o de la inteligencia artificial, se sumen y aprendan tecnologías y habilidades pioneras a nivel global”, agrega.

“Hoy lo que estamos haciendo en Deep Agro es trascendente a nivel global. Estamos generando un cambio en el medio ambiente muy positivo y eso nos vuelve un gran lugar para trabajar, para aprender y para generar un cambio a nivel global”, afirma. Desde su nacimiento, la compañía siempre estuvo pensada con proyección a futuro: “Nos vemos en el futuro como una compañía global y relevante. Hoy nos visualizamos, a futuro con una presencia importante en Latinoamérica, pensándonos de acá a cinco o diez años, y luego buscamos tener una presencia a nivel global más importante”.

Cómo alimentar al mundo

Sobre el futuro de la empresa y en qué se concentrará sus negocios aclaran que seguirán poniendo énfasis en los problemas del campo: “Hoy estamos censando milímetro a milímetro todo dentro del lote y eso nos da un volumen de información realmente importante que por medio de distintos algoritmos de inteligencia artificial pueden generar tanto toma de decisiones para aplicación selectiva no solo de herbicidas, sino de cualquier producto químico líquido. Además logramos un montón de información de diagnóstico, que nos posibilita empezar a entender, por ejemplo, las enfermedades que tiene una planta en el lote o cómo está naciendo un cultivo”, asegura Baruffaldi.

“Cómo vamos a alimentar al mundo que se viene” es uno de los temas que le ocupa a la compañía, así como “entender cuál va a ser la calidad de esos productos y cuál queremos que sea. Deep Agro le permite generar al productor un producto de mejor calidad, reducir costos y ser mucho más eficiente. Entonces le permite también crecer como empresa. De acá en adelante, el rol de agro en la alimentación va a ser fundamental, incluso no solo en cultivos extensivos como los que estamos trabajando sino en cultivos que vayan directo a la mesa, al consumo humano, como el trigo, pero también frutas, hortalizas o maní”. La idea de la empresa es “generar soluciones que estén libres de traza química, sin residuos químicos, básicamente de mayor calidad”.