Imponen el peaje único para el acceso a los puertos del Gran Rosario

Si todo marcha de acuerdo a los planes del Gobierno de Santa Fe, en abril de 2026 se lanzará la licitación para concesionar el nuevo sistema de acceso a los puertos del cordón industrial, que abarca desde Arroyo Seco hasta Timbúes. El llamado Circuito de Ingreso Portuario (CIP) marca un cambio fuerte en la logística terrestre santafesina, en tanto que -entre otros cambios- propone que un único concesionario privado se encargará del mantenimiento y el cobro de los peajes del camino que recorren cerca de 2 millones de camiones por año, en busca de las 96 millones de toneladas de granos anuales que produce el polo oleaginoso del Gran Rosario. 

La Provincia quiere tener el proyecto a punto en enero, para lograr la aprobación legislativa antes del primer trimestre del año que viene. Si bien el nuevo sistema modifica integralmente la logística post cosecha, el punto más ríspido del plan que impulsa la administración Pullaro es el sistema de peajes: a partir de su aprobación, los camiones pagarán una tarifa por única vez al concesionario -el monto no está definido pero se prevé entre u$s35 y u$s40- y la recaudación será administrada por el gobierno santafesino. Es decir, los municipios del cordón industrial dejarían de percibir las tasas viales que cobran actualmente, una caja representativa para las arcas locales.   

Eso fue lo que quedó “consensuado” después de una reunión de presentación del proyecto de la que participaron el ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini; el de Obras Públicas, Lisandro Enrico; el ministro de Vinculación Institucional, Julián Galdeano; y los intendentes  Leonardo Raimundo (San Lorenzo), Carlos de Grandis (Puerto General San Martín), Antonio Fiorenza (Timbúes), Daniel Tonelli (Arroyo Seco), Carlos Pighin (Alvear), Alberto Ricci (Villa Gobernador Gálvez) y Esteban Ferri (General Lagos).

Según pudo saber Punto biz, la reunión tuvo dos climas. Hubo pleno entendimiento cuando la Provincia presentó las obras públicas que hizo y sobre todo las que hará en virtud del nuevo circuito (prevén desembolsar u$s1.000 M para mejorar la infraestructura vial, una deuda histórica), pero las diferencias afloraron cuando la Provincia impuso, sin concesiones, el sistema de peaje único. 

“Se está charlando cómo se distribuirán esos fondos que recaudará el concesionario, hay un compromiso de mantener proporción con lo que cada municipio recibe actualmente, pero el peaje único está definido”, indicó Galdeano, al tiempo que recordó que “el esquema actual lleva años en marcha y el estado de las rutas es preocupante, con lo cual no está funcionando”.

Aunque los municipios seguirían cobrando el peaje a los vehículos que no accedan a los puertos, claro que a a los intendentes no les cayó para nada en gracia perder tamaña fuente de ingresos, y ayer intentaron defender las tasas presentando un reporte de los gastos que afrontan con esos fondos, generalmente vinculados al desgaste que ocasiona en esas localidades el transporte de camiones. "Lo cierto es que representa esa tasa es muy diferente entre un municipio y el otro, va del 10% de la recaudación municipal a más del 40%. Así que en adelante conversaremos sobre el esquema de distribución de esos fondos", anticipó Galdeano.

Si bien la idea es establecer una tarifa cercana a u$s1 por tonelada transportada, la tarifa que pagarán los camiones no está cerrada, sino que se evaluará una vez que esté listo el informe técnico que está armando la consultora Arbet América.  

Punto por punto, qué cambia con el CIP

Se establecería una suerte de “circunvalación”, una ruta determinada por la que circularán los camiones que luego accederán a los puertos. Esa ruta no está definida aún, pero la provincia tiene un Plan A y un Plan B. El primero, considerado el más “deseable”, toma la traza de la Ruta Nacional A012, considerada el eje estructural para conformar un segundo anillo de circunvalación para el transporte pesado. Claro que eso dependerá de la buena voluntad de Nación para ceder el dominio de los tramos de esa arteria, hoy bajo su órbita.

Si esos planes no se cedieran, el Plan B incorpora la Ruta Provincial 26, que podría configurarse como un tercer anillo que rodee al Área Metropolitana de Rosario, complementando a la actual A001(la avenida de Circunvalación de Rosario hoy convertida en autopista urbana). El programa de obras proyectadas bajo concesión abarca intervenciones de alto impacto, incluyendo la conversión total de la A012 en autovía, pasos a distinto nivel en cruces ferroviarios, nuevas variantes viales (Roldán y Ricardone) y conexiones claves con puertos y accesos estratégicos.  

- Se delimitará una franja horaria de 12 horas para la recepción de camiones, apoyada en un sistema de monitoreo en tiempo real. Este mecanismo permitirá interceptar vehículos que circulen fuera de su turno asignado, evitando embotellamientos en los ejidos urbanos.

- Se adjudicará una concesión única del sistema y un peaje único. Este modelo permitiría un mantenimiento permanente y la ejecución de obras de gran escala bajo una misma unidad de gestión, integrando rutas nacionales, provinciales y caminos municipales en un circuito logístico único.