Respiradores low cost: la idea es rosarina pero se fabricarán en Buenos Aires

La Universidad Nacional de Rosario (UNR) y la empresa local Inventu llegaron a un acuerdo con Goldmund SA (Peabody), para avanzar en la fabricación en serie de su modelo de respiradores artificiales de bajo costo. Confían en iniciar la producción durante este segundo semestre, tras completar la semana pasada la presentación de todos los ensayos de seguridad ante el gobierno nacional.

Más allá del entendimiento con la compañía radicada en Hurlingham, el proyecto mantendrá su formato de código abierto, por lo que puede ser reproducido en cualquier parte del mundo donde se cuenten con las partes para hacerlo. Así lo hizo la provincia de Corrientes -donde ya tienen más de 100 unidades- y se espera que otras lo repitan en las próximas semanas.

El convenio con la firma bonaerense permitió allanar el engorroso camino de autorizaciones que requiere un artefacto de este tipo, básicamente por las tramitaciones ante Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat). Entre sus requisitos, el organismo pide que el proceso productivo sea avalado por una empresa que ya esté incluida en su registro, tal el caso de Peabody.

"La certificación se llevó mucho esfuerzo y tiempo en el laboratorio, con una gran inversión de nuestra parte, cercana a los $ 30 M", contó a Punto biz Dante Choi, presidente de Goldmun SA, empresa que además fue elegida por su amplia red territorial de posventa: cuenta con más de 200 puntos en todo el país.

El empresario apostó por el proyecto rosarino convencido de la necesidad de diversificar su portfolio y ampliar los horizontes de su negocio: "El equipamiento médico es un tema estratégico. Estamos también avanzando con otros artículos, siempre en alianza con desarrolladores jóvenes. En Argentina hay que jugarse por los recursos humanos del país, que son su verdadero activo", reflexionó.

Una de las principales ventajas del equipo pasa por su bajo costo de fabricación: mientras que en el mercado un respirador puede costar entre u$s 20.000 y u$s 30.000, este modelo oscila entre el 20% y 25% de ese valor: entre u$s 4.000 y u$s 5.000.

Respecto a la estrategia comercial, los responsables del proyecto indicaron que "dependerá de la demanda", pero que habrá una prioridad para el mercado doméstico, actualmente intervenido por el gobierno nacional. Amén de ello, se avanzará en el mercado de exportación.

"Es muy importante todo el camino recorrido hasta aquí, con la posibilidad de haber finalizado los ensayos vinculados a la seguridad del equipo que fue un trabajo muy arduo", dijo a Punto biz el rector de la UNR Franco Bartolacci, quien agregó que "hay vocación y voluntad de muchos lugares para reproducir el modelo, con novedades que seguramente se estarán anunciando en los próximos días".

Para la empresa Inventu el acuerdo significa un nuevo paso en la realización de su objetivo, en el marco de un proceso que inició a principios de marzo, cuando sus integrantes comenzaron a discutir sobre cómo podían colaborar con la pandemia que ya era noticia en todo el mundo. “Somos un grupo de científicos locos que sabemos resolver problemas complejos a la gente”, suelen ser las palabras de Simón Carpman, uno de sus titulares, sobre su empresa, que ya asesoró a más de 30 grandes compañías entre las que se incluyen nombres de distintos rubros, como La Virginia, Paladini, Johnson y Johnson, Ferrero, Metalsur y Nuevo Central Argentino (NCA).