Tienen un local en Pellegrini, abren otro y se lanzan a fabricar su propia cerveza

El corredor gastronómico Pellegrini inauguró el primer parador de cerveza de toda su avenida. Se trata de World Beer, un nuevo local que inauguró el pasado 17 de octubre, con una barra que incluye 27 canillas de distintas marcas locales como: Ánfora, Kelbermatter, Keinkater, Hopfen y Hormiga Negra, esta última de Buenos Aires. La apuesta pertenece a Vanina Heredia y Cirstián Santoro, dueños de King Beer, que además de esta segunda apertura, se lanzarán a producir su propia cerveza artesanal, para lo cual montaron una fábrica que comenzará a funcionar antes de fin de año.

“Nosotros quisimos traer un nuevo concepto de cerveza artesanal a Pellegrini, por eso se nos ocurrió tener un formato de parador como hay en otras parte de la ciudad. Trabajamos con las mismas marcas que en King Beer e incluimos una nueva que es Hormiga Negra. Otra novedad es que estamos trabajando en el proyecto de expandirnos con nuestra propia marca de cervezas. Ya tenemos el lugar de nuestra fábrica y tenemos pensado arrancar con la producción antes de fin de año”, contó Heredía, y añadió que van a empezar elaborando cinco estilos clásicos, tanto para King Beer como para World Beer.

Este último está ubicado en el local donde hasta hace unos meses se encontraba el restaurante Brava, en Pellegrini 1647. Según Heredia, fue cuando se enteraron que estaba en alquiler que decidieron invertir en la propuesta de abrir un parador. A diferencia de King Beer, el nuevo espacio no cuenta con atención a las mesas, sino que es autoservicio, y tiene una carta más sencilla en lo que respecta a variedad de comidas y tragos. “Ofrecemos opciones tradicionales como tablas, hamburguesas y unas pizzas que hacemos nosotros caseras. También tenemos algunos tragos sencillos y durante todo octubre, por ser el mes de inauguración, tenemos todos los estilos en happy hour a $89 pesos”, destacó la dueña.

El local abre todos los días desde las 17 y cuenta con un salón y un gran patio cervecero, además de mesas en la vereda, lo que le da una capacidad para aproximadamente 300 personas. En cuanto al lanzamiento de su propia marca, Heredia señaló que no descartan producir para otros bares cuando logren afianzarse. “Pasar a producir y vender estilos propios hace a la identidad de nuestros locales, a no ser solo un bar que vende cerveza y ofrecer variedades de la casa. En un futuro, cuando estemos bien asentados, la idea es que los comercios que quieran también puedan venderla”, remarcó.