Vassalli: un interesado pica en punta para quedarse con la fábrica

El recambio presidencial encontró a la histórica planta de cosechadoras Vassalli Fabril en pleno proceso de venta. Más allá de que el sector de la maquinaria agrícola parece que experimentará un 2024 de fuerte recuperación de ventas -después de sufrir con la sequía del campo-, el temor que genera la posibilidad de que haya escaso apoyo oficial al sector metalúrgico alejó interesados estratégicos en comprar el complejo fabril, hoy bajo el control accionario mayoritario de Esteban Eskenazi, heredero del poderoso Grupo Petersen, propietario del Banco Santa Fe, entre otros.

Según reportaron a Punto biz fuentes ligadas a la negociación con los potenciales interesados en adquirir Vassalli, “hay un solo industrial que mantiene firmes intenciones en comprar la compañía”.

Si bien el nombre del empresario se mantiene en reserva, este medio pudo saber que se trata de un referente en el sector metalmecánico con experiencia en la reconversión de firmas con baja productividad. El grupo en cuestión tiene varias operaciones industriales en el Gran Rosario y es especialista en la fabricación de autopartes.

De hecho se supo que entre ayer miércoles y este jueves era inminente la cristalización de una oferta de pago del operador santafesino interesado en quedarse con Vassalli Fabril. Restaba, obviamente, que Eskenazi finalmente aceptara las condiciones para sellar al menos un acuerdo de palabra. Además del industrial, la propuesta de adquisición integraría en el negocio a un actor vinculado a los negocios financieros.

“Estamos siempre esperanzados con la chance de venta y participamos activamente en todas las negociaciones. Pero lo cierto es que el cambio de Gobierno hizo caer algunos de los interesados. Hay mucho temor en el ámbito industrial y nosotros mismo como dirigentes sindicales entendemos que las políticas oficiales tendientes a una apertura indiscriminada de las importaciones pueden llegar a afectar severamente los regímenes de producción”, expuso Diego Romero, referente de la filial Firmat de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), en contacto con Punto biz.

El derrotero de Eskenazi en la empresa creada en 1949 por Roque Vassalli se dio en el marco del fondo de inversión que capitalizó una empresa “sin dueño” tras el paso de un grupo de concesionarios de la marca en el gerenciamiento luego de que la heredera del fundador, Mariana Vassalli se retirara del negocio. Originalmente fueron 15 los inversores, entre los que figuraban Julio Crivelli, Juan Manuel Colazo y Guillermo Ferraro -actual ministro de Infraestructura de la Nación-. Eskenazi llegó después, llevado por alguno de sus colegas empresarios y fue capitalizando la firma hasta quedar con el 90% de las acciones. El 10% restante está en manos de Matías Carballo, hermano de un peso pesado del negocio bancario.

Por más que la planta de FIrmat tiene cartel de venta,  la conducción actual Vassalli Fabril viene cumpliendo con el pago de los sueldos para los 280 empleados que ante la merma en la productividad del complejo hoy operan en turnos limitados.