Se jubila un gerente que jugó fuerte en los negocios y la política

Lo tomó por sorpresa. Si bien venía charlando sobre iniciar los trámites de jubilación, una imprevista mención en pleno remate en la Exposición Rural de Palermo la semana pasada expuso ante los referentes del negocio ganadero una novedad que generó nostalgia. Raúl Milano, el hombre que se puso al hombro la gestación de Rosgan sale de la primera línea de trinchera y deja la gerencia general del mercado televisado.

Abandonar el puesto no significa desligarse definitivamente de Rosgan. Es que el conocimiento que expone en torno a la cadena de valor bovina lo hace una pieza difícil de reemplazar. “Cumplí el martes 1° de agosto 70 años y en cualquier estructura cuando se hace presente el tiempo de la jubilación hay que gestar la plataforma para darle lugar a los nuevos. Es una dinámica natural y los cambios son necesarios. De todas maneras voy a seguir estando”, mencionó Milano, en contacto con Punto biz.

“No te voy a negar que el reconocimiento de la comisión directiva de Rosgan en pleno trajín en el remate en Palermo me sorprendió, no me veía venir que me hicieran un homenaje”, indicó el ejecutivo que sin embargo aceptó gustoso el reconocimiento, “Walter (Tombolini, presidente de Rosgan) lo hizo con la mejor intención empeñado en que no había que pensar en un brindis interno con la mesa directiva”, sumó.

Licenciado en economía, para muchos la vida laboral de Milano estuvo siempre dedicada a la ganadería. Si bien integró diferentes roles en la cadena de valor de la carne, dedicó tiempo a la política y al gerenciamiento de otras empresas también vinculadas al campo.

“Desde 1977 al 83, mi primer trabajo formal fue en la Cooperativa de Carniceros que tuvo un hito importante con la adquisición en 1981 del frigorífico Fricoop que luego se vendió a Mattievich y hoy es la planta de faena de Coto. En aquella circunstancia armamos el establecimiento entre dos personas. Dicha tarea me dio una perspectiva muy interesante de la cadena”, repasa.

Con el regreso de la democracia tuvo una incursión central en la política. Fue diputado nacional por el radicalismo hasta 1989 y volvió a la actividad privada luego. “Siempre defendí elementos claves como el fortalecimiento de la actividad productiva, tanto en mis roles como parlamentario y también en mi rol de ejecutivo”, asegura.

Lo que siguió fueron cuatro años en la petroquímica Pasa del Grupo Pérez Companc y un salto que lo catapultó de nuevo al frigorífico que había dejado en el 83. “Volví a resolver algunos quilombos. Me llamaron por mi conocimiento en la actividad”, se sincera. Fue por un corto período para regresar otra vez al terreno de la política.

“En el 99 el ‘Vasco’ Usandizaga me dijo que tenía que ser concejal y ahí fuí. Estuve hasta 2003 en el Palacio Vasallo en una tarea de la que me arrepiento un poco. No me sentía muy a gusto allí. Fue tras ese lapso en que volvió definitivamente a relacionarse otra vez con la carne”, precisó.

De 2003 al 2006 armó una sociedad dedicada a la exportación de cortes vacunos y luego el desembarco en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). “Fue un desafío muy interesante el que me propusieron en la entidad. La comisión directiva de entonces quería traer las vacas a la Bolsa y ahí fui yo quien aceptó el desafío de armar Rosgan. Me acuerdo que en la primera recorrida hablando con consignatarios y productores hice 11.000 kilómetros. Fueron años de mucho esfuerzo pero con un claro objetivo: hacer el primer mercado televisado del país. Para 2008 el anhelo se hacía realidad”, rememoró Milano.

“Es un producto que al paso de los años sigue siendo innovador. Rompimos los moldes y marcamos un camino que incluso fue trascendental para el desarrollo de otros productos muy creativos que encaró luego la Bolsa de Rosario. Pero lo hecho, hecho está y hay que también saber hacerse a un lado para dejar el espacio a los nuevos. Realmente estoy muy esperanzado sobre el futuro del mercado”, cerró.