Sancor, con la soga al cuello de deudas: la EPE amenazó con dejarla sin luz

La crisis extendida de la láctea SanCor está en uno de sus momentos más complicados en términos de operatividad y presencia comercial. La unión de cooperativas acumula una deuda financiera superior a los u$s400 M y en los primeros días del año bajó estrepitosamente su capacidad productiva: cerró el 2024 procesando 500.000 litros de leche diarios pero terminará enero en apenas 200.000 litros diarios. Teniendo en cuenta que el promedio en las épocas de gloria de la empresa eran 4 millones de litro, hoy la producción está a un 5% de lo que supo ser la compañía con sede principal en Sunchales. 

Para colmo de males, su operación en Santa Fe pende de un hilo, en tanto que desde la Empresa Provincial de Energía de Santa Fe (EPE) confirmaron que están a un paso de cortarle la electricidad en las plantas de provincia por falta de pago. La compañía estatal les dio un ultimátum: tienen plazo hasta el 28 de febrero para cancelar una deuda de alrededor de $2.500 M. La cúpula de la lechera viene de extender una nota formal a las autoridades de EPE solicitando la revisión de su estado, pero aún no recibieron noticias (vale recordar que, en sus tiempos de gobernador provincial, Omar Perotti les perdonó $500 M de ese rojo).

La amenaza de la EPE complica y mucho, porque en la actualidad la meta de la empresa es mantenerse operativa, a la espera de que aparezca un inversor privado que acerque fondos frescos. Ahora, pareciera que la aparición del comprador debería ser en tiempo de descuento. 

Piso productivo y salarios adeudados

En la actualidad, SanCor mantiene en funcionamiento mínimo a sus unidades de producción de cremas, leches, fórmulas infantiles, dulce de leche, quesos y mantecas.

Desde la compañía reconocen que carecen de "flujo en la caja", por lo que siguen los incumplimientos de deudas salariales y el pago a proveedores.

En materia de salarios, si bien la flamante cúpula de la empresa propuso un plan de pago de la deuda a los empleados, y se había llegado a un acuerdo con Atilra para frenar las medidas de fuerza a mediados del 2024, la nueva directiva no pudo cumplir con los abonos establecidos. Y el gremio anticipó que exigirá el pago inmediato de las cuotas sindicales mediante una denuncia ante la Secretaría de Trabajo.

La cúpula acordó pagar $12 M a los empleados según la antigüedad y bajo un esquema de cuanto menos 24 cuotas. SanCor venía de desvincular a un grupo de trabajadores que se encontraba sin realizar actividades desde hacía 5 años.

Los inconvenientes resurgieron a partir de las dificultades de la empresa para hacerse con fondos "frescos", lo cual le impidió cumplir con el pago de los $500.000 que inicialmente debían recibir los empleados a los que les adeuda haberes.

La preocupación entre los trabajadores creció aún más en cuanto se hizo saber que la compañía dividiría ese monto en cuotas más chicas. El malestar con el plantel de operarios volvió activarse.