Redolfi: “La Favorita es una muestra de que el empresariado se puede unir”

Luego de varios meses de espera, este viernes por la mañana reabrió sus puertas la emblemática tienda La Favorita. El histórico edificio construido en 1897 volvió a abrir al público con una oferta variada de marcas locales y nacionales de diferentes rubros como moda, decoración, hogar, servicios y belleza.

La reapertura de la tienda que fundaron los hermanos Ángel y Ramón García tiene como objetivo revitalizar el centro rosarino y recuperar el esplendor que tuvo el edificio décadas atrás. El centro comercial cuenta con 10.000 metros cuadrados y unos 30 locales distribuidos en cuatro plantas.

El proceso de remodelación tuvo el foco en respetar las cualidades del histórico edificio, y a la vez adaptarlo al diseño actual. Gabriel Redolfi, director de la constructora MSR que estuvo a cargo de las reformas, brindó todos los detalles sobre la obra en diálogo radial con Base de Datos (FM Meridiano 107.1 Lunes a viernes de 10 a 12 hs).

-¿Ya está listo para arrancar a funcionar a pleno o faltarán detalles?

-Quedan algunas cosas por hacer, sobre todo en áreas de servicio, en la zona de salida de emergencia, pero obras menores, de pintura, algún acondicionamiento, porque lógicamente a último momento se le dio prioridad a ingresos de mercadería y materiales de los locales comerciales que estaban terminando sus stands.

-¿Qué fue lo más difícil de intervenir a nivel arquitectónico del edificio?

- Mira, lo que más intervenimos en realidad fue en la parte de instalaciones, infraestructura del edificio, había que allornar mucha infraestructura, redes de gas totalmente nuevas, ese edificio no tenía redes de gas interna, se hizo nuevo, red eléctrica, sistemas cloacales, tanques, todo lo que hace al funcionamiento que uno después no lo ve, pero que hace a la esencia de que un espacio funcione correctamente. Lo más difícil era el respeto total y absoluto y el potenciamiento de las cualidades de ese edificio, elegir un piso de muy buena calidad, pero muy neutro, para que sea como un pedestal de ese edificio magnífico. Restaurar las molduras, restaurar las fachadas, las esculturas, vitreaux en el mármol del ingreso, que tuvimos el gusto de que nos lo cedió el Museo de la Ciudad en préstamo y lo restauramos, hicieron un trabajo increíble el equipo de restauradoras del Museo de la Ciudad, liderado por Nicolás Charles, que es el director del museo. Todo eso, fue un millar de cosas que se fueron llevando adelante y todo con el mismo objetivo de potenciar este edificio y que vuelva a tener el esplendor que había perdido, no ya vacío, sino incluso antes en el uso comercial de esa marca extranjera que había priorizado exprimirlo desde el punto de vista comercial y tapó balcones, esculturas, molduras, y eso fue un desafío grande para nosotros volver a darle el esplendor que tenía antes.

-¿Qué queda por hacer en el lugar? Porque bueno, falta por ahí desarrollar el subsuelo.

- En el cuarto piso y terrazas no, porque está ocupado todo por equipos técnicos, aire acondicionado, generador eléctrico, infraestructura de mantenimiento del edificio. El primer subsuelo sí, que aparte de un subsuelo siempre de un uso muy tradicional del edificio y eso está previsto para la segunda etapa y ya estamos planificando tanto comercialmente como arquitectónicamente el armado de ese subsuelo que aún no tenemos plazo, aún no tenemos definición final, pero ya estamos trabajando a full con ese tema.

-¿Ahí iría bazar también?

No, porque para lo que es blanquería y bazar se utilizaron el primer y segundo piso. Ahí abajo había dos alternativas de trabajo, un uso grande que ocupara todo el subsuelo, pero nos estamos yendo hacia un uso de locales más chicos. Se está pensando en algo que tenga que ver con estética y salud, por ejemplo, no digo que vaya a ser esto, pero está dentro de los planes, el tema de pilates, estética, mantenimiento corporal y otros comercios minoristas también de rubros generales. 

- Está la idea de replicar esta fórmula que hicieron con Guillermo Nudemberg, que es el desarrollador comercial de Fisherton Mall y La Favorita, en un proyecto de MSR en la zona oeste, en lo que es Cinépolis, lo que era el complejo Village. ¿Eso se está terminando de dar forma o está recién arrancando? 

- Estamos avanzando, falta mucho todavía. Yo ya hace dos años que estoy trabajando con la Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad para hacer ahí un desarrollo inmobiliario, edificios en propiedad horizontal y un desarrollo que lo estamos trabajando con Guillermo  de todas esas áreas que están vacías desde hace ya un tiempo. Creemos que va a ser algo muy bueno sobre todo porque en su momento ese complejo era casi un poquito periférico en Rosario y hoy por hoy con el crecimiento que ha tenido la zona de Fisherton, Funes, Roldán, casi que hoy es una bisagra del centro a la zona oeste de Rosario y hay muchos interesados comerciales como para instalar el complejo.