Pascual Construcciones premió a los muralistas que intervinieron Howo

El último sábado, Pascual Construcciones premió a los ganadores del "Concurso nacional de muralistas", que contó con más de 200 participantes de todo el país y del exterior. El evento se llevó a cabo en el edificio Howo (San Lorenzo 1370), una obra que combina atractivamente arquitectura y arte.

El edificio Howo (abreviatura de Home and Work), que posee 8 pisos y en cada uno tiene pintado un mural, fue construido con el fin de maximizar la renta de los inversores gracias al alquiler temporario por plataformas web. "Venimos trabajando con arte desde el 2015. Cuando pensamos en Howo, pensamos en hacer un proyecto diferente, por eso decidimos traer el modelo del Airbnb, con alquileres temporarios. Pensamos el concepto, la forma de uso que tendría el edificio, qué amenities y qué partes deberían componerlo a diferencia de uno tradicional, y así fue que el arte se introdujo. Quisimos hacer en este edificio, que ya tiene características únicas, algo que lo termine de diferenciar. Y lo transformamos en una galería de arte", aseguró Gonzalo Pascual, dueño de Pascual Construcciones, en diálogo con Punto Biz. 

El concurso nacional de muralistas tuvo jurados de lujo como Milo Lockett y Martín Ron. El artista chaqueño de 55 años indicó: "Fue muy difícil elegir a los ganadores porque hubo 230 propuestas muy buenas. Priorizamos que sea arte urbano. Tratamos de que sea totalmente diferente un mural a otro, que haya distintas propuestas y que puedan convivir para que tenga un atractivo. No queríamos inclinar la balanza hacia un estilo de pintura, queríamos que haya una variedad y se logró. Y lo otro que se logró en la selección, con mucho trabajo y criterio, es que haya artistas rosarinos, porque son los dueños de casa. No es traer una idea desde afuera hacia la ciudad, sino una idea que se gesta en la ciudad de Rosario y va hacia afuera".

En relación al potencial artístico de Rosario, Lockett señaló: "Ya hay una carrera de muralismo, que es un antecedente increíble. Los muralistas se tienen que formar, ya que es una tarea difícil, que muchas veces no está remunerada. Si logramos tener calidad y darle más calidad a la obra de los artistas, vamos a conseguir sponsors para que puedan pintar más murales. Por otro lado, muy pocos lugares del mundo tienen corredores de muralismo, ya en pocas ciudades se permite pintar. Argentina es uno de los pocos países donde todavía se puede pintar en la calle, tenemos que hacer de eso una potencia". 

El gran ganador del concurso fue Nicolás Valeiras, un joven oriundo de la Capital Federal. "Hubo más de 200 participantes, haber salido primero es un orgullo. El edificio donde está empotrada mi obra tiene un estilo neoyorquino de construcción. Yo venía trabajando una obra de autos obsoletos, en desuso, y pensé en utilizar esos autos obsoletos para grafitear, con una estética New York, y de algún modo enaltecer el graffiti, que viene de esa ciudad. Entonces se me ocurrió que podía combinar los autos y el graffiti. Por otro lado, no me quería olvidar de dónde estaba el edificio, que es en Rosario, así que mezclé esos autos grafiteados con algunos personajes, y flora y fauna típica de la provincia de Santa Fe", expresó.

En relación al proceso que realizó hasta llegar a ser el gran ganador del concurso nacional de muralistas, Valeiras comentó: "Me mandaron la convocatoria unos amigos. Cuando la leí, me sentí muy cómodo con la temática y sentí que se podía hacer algo potente y que me represente, sentí que no tenía que virar mi obra para encajar en la temática o en la propuesta que Pascual pretendía. La convocatoria fue a finales de julio. Me puse a diseñar, hice la obra y encajó bien conceptualmente con las bases del concurso y con la idea de la constructora. Evidentemente evaluaron cierto poder de realización y acá llegué", concluyó el joven que muestra sus obras en sus redes sociales (@Nico.valeiras).