Pasaron de vender bowls de frutas a producir yogur en planta propia

Ana Carla Naput es profesora de Educación Física y, en el marco de la pandemia, dio vida a Chopped, un emprendimiento de frutas y yogur artesanal que se convirtió en su empresa. Con el tiempo fue perfeccionando el negocio, sumó a su papá Carlos y a su hermana Martina, y de producir artesanalmente en su casa de Santo Tomé pasaron a tener planta propia. 

“Con mi hermana Martina, se nos ocurrió vender frutas en trozos y preparamos unos bowls. Era nuestra manera de entretenernos, ya que nuestros trabajos estaban pausados”, relató Naput a Punto biz. De ahí viene el nombre del negocio, que significa "troceado" en inglés. Tras ver que el emprendimiento crecía, incorporaron el yogur dentro de su portafolio de productos. 

Con base en la ciudad ubicada en el departamento La Capital, Chopped se transformó en una empresa familiar que cortó cintas de su propia fábrica en marzo de 2023 y hoy cuenta también con un local de venta al público en el que ofrecen los productos envasados y a granel. De esta forma, comercializan a diferentes negocios, ya sea distribuidoras o restaurantes. Con la marca llegan a Rosario, Rafaela, Entre Ríos, Santa Fe y Esperanza. 

En la actualidad, fabrican más de una tonelada de yogur al mes y planean seguir expandiéndose en producción, superficie y zona de influencia. “Estamos creciendo en producción todos los meses y armando toda la logística para llegar a Córdoba. Hay momentos en que la fábrica nos queda chica”, expresó Ana Carla.

Hace poco incorporaron caldo de huesos en cubos congelados y proyectan ampliar la oferta para tentar a un público más diverso. “Más allá de que ahora lo elaboramos en una fábrica, queremos seguir  manteniendo la línea de lo natural, artesanal y fresco”, concluyó la emprendedora.