Llevan décadas en el negocio eléctrico y se la juegan por la energía solar 

Los Greco fundaron Transelec en 1988, en ese entonces como un comercio de compraventa de artículos eléctricos. Con el tiempo fueron agrandando el negocio: armaron un área de reparación de los productos que vendían, comenzaron a fabricar tableros eléctricos y a diseñar proyectos eléctricos integrales (por ejemplo, la iluminación de un estadio, una industria u oficinas).

Hace una década plantaron bandera en el Parque Industrial Metropolitano de Pérez, con una planta de 4.000 m2 cubiertos, en un lote de más de 6.000 m2. Ya consolidados en el rubro eléctrico, este año encararon un viraje hacia la sustentabilidad, e invirtieron capital propio para instalar 60 paneles solares, que cubren alrededor del 70% del consumo eléctrico total de la planta.

También instalaron un cargador para autos eléctricos, adquirieron apiladores eléctricos y se aprestan para incorporar un utilitario que se alimenta de energía limpia. La meta es certificar normas ISO14001, aval internacional para una gestión eficaz en materia medioambiental. Tienen la última auditoría a finales de septiembre.

El futuro del negocio pinta verde

La apuesta a la sustentabilidad no se reduce a la planta propia, sino que incorporaron los productos a su catálogo: comercializan cargadores Scame y paneles solares de las marcas Schneider y Siemens. 

“Volví empapado de estas ideas de un viaje a España. Fuimos a visitar empresas que, como nosotros, son miembros de la Red Fegime, un pool internacional de compras y de cooperación corporativa. Entramos en sintonía con una compañía en particular, que creció una barbaridad apuntando cañones a las energías alternativas. Ellos tuvieron que crear una empresa nueva y levantar otra planta para atender la demanda”, comentó Ramiro Greco, socio gerente y segunda generación en Transelec, a la vez que aclaró que hoy “la mayoría de los grandes fabricantes de productos eléctricos incorporan tecnología para ganar eficiencia energética”.   

La remada para lograr stock

Un beneficio colateral de comercializar productos como los paneles solares es que conllevan un valor agregado en materia de servicios: “Quienes adquieren un panel lo quieren llave en mano, ya instalado. Nuestro objetivo es conformar un equipo de instaladores y apuntalar la prestación de servicios”, reveló Greco.

En tanto, la comercialización de productos importados -el grueso en este rubro- encuentra cada vez más trabas. “Siempre trabajamos con mucho stock por los problemas de disponibilidad. De hecho, estamos evaluando sumar superficie cubierta a mediano plazo  para poder stockear. Hoy el precio pasó a un segundo plano, lo que importa es tener disponibilidad”, indicó.