La poca lluvia que cayó no sirvió para aliviar el trigo

Las precipitaciones registradas en las últimas dos semanas no alcanzaron para aplacar el déficit de humedad, sobre todo el centro y norte del área agrícola, en muchos casos provocando fallas en la emergencia de los cuadros sembrados.

Por su parte, el 70,6% del área en pie de trigo presenta una condición hídrica adecuada, de acuerdo con el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Estos eventos se concentraron en el sur del área agrícola, lo que permitió llevar a cabo las labores de fertilización propias de macollaje. No obstante, sobre el centro y norte, el aumento de las temperaturas acelera el desarrollo y aumenta la demanda de humedad. Sumado a ello, la ocurrencia de heladas y la aparición de focos de plagas y enfermedades afectan la condición del cultivo. 

Mientras tanto, la recolección de maíz con destino grano comercial transita su tramo final en gran parte del área agrícola nacional. La baja en la humedad de los granos impulsó la recolección en provincias como Chaco y Salta.

Luego de registrar un avance intersemanal en la cosecha de 8,1 puntos porcentuales, ya se recolectó el 97,9 % del área apta en todo el país. A la fecha, el rinde medio nacional se ubica en los 69,9 quintales por hectárea. Frente a este panorama, se mantiene la proyección de producción para la campaña 2021/22 en 52.000.000 toneladas producto de un ajuste en el área destinada al cereal. 

Por último, la cosecha de sorgo se dio por finalizada en todo el país. Gran parte de los avances relevados durante los últimos quince días se concentraron en las provincias de Chaco, Santa Fe y Buenos Aires. Las pérdidas de superficie a nivel nacional ascendieron a 80.000 hectáreas. El rinde medio culminó en 38 quintales, luego de cosecharse cerca de 920.000 hectáreas. De esta manera, se lograron recolectar 3,5 millones de toneladas del cereal durante la campaña 2021/22, 100.000 toneladas más que el volumen recolectado el ciclo anterior.