Cambió la moda por la fábrica y suma inversión estratégica

Aunque no sabe si en algún momento volverá a administrar locales de indumentaria, Nora Bullentini repasa sus años de representante para Rosario y la región de la marca Classlife -llegó a tener cinco sucursales- sabiendo que “para cada cosa hay un momento indicado”. Lejos del mercado textil, hoy la empresaria es protagonista en el ambiente industrial dedicándose a una actividad que está lejos de la atmósfera de la moda. Hoy lidera Ignis Refractory SA, fábrica de materiales para compañías que trabajan con alta temperatura.

Con fábrica en Ramallo, el camino que decidió encarar Bullentini es el de retomar el oficio de su padre, un geólogo que se decidió a la producción de especialidades refractarias empleados en la industria pesada. “Hasta antes de la pandemia convivieron en mi las dos actividades. Seguí administrando locales propios de indumentaria y gerenciaba mi empresa de especialidades refractarias. Luego del paso del coronavirus decidí orientarme solo a Ignis Refractory para potenciar”, expuso la mujer en contacto con Punto biz.

La firma hoy lidera un lugar de privilegio en el mercado y encara inversiones. “Si bien tenemos planta en Ramallo estamos levantando una nueva nave en Ibarlucea para hacer algunas fases del proceso de fabricación, allí operamos en un terreno alquilado y de la mano de un socio estamos creciendo en volumen de producción”, sumó.

El inicio del camino industrial de Bullentini se dio cuando en medio de su recorrido en el mundo de la moda abrió una molienda de materiales en Ramallo, sitio que ahora transformó en la base fabril de Ignis Refractory. “Te puedo decir que vivo con algo de nostalgia aquellos años de Classlife, pero insistió que para cada momento hay un tiempo. Hoy estamos apostando fuerte a crecer en un negocio muy específico que tiene pocos jugadores”, expuso desde las oficinas corporativas de la firma ubicadas en Puerto Norte.

Entre las novedades de la compañía, se acaban de asociar con un prestador de servicio nicoleño para, además de proveer los revestimientos refractarios de uso industrial, dedicarse a la instalación y montaje de hornos.

“Como en otros rubros de la actividad manufacturera, el nuestro sufre las dificultades del ingreso de insumos importados que son fundamentales para el trabajo diario. De todas maneras intentamos acomodarnos a una coyuntura completa”, mencionó.