“Mi objetivo era ser el mejor promedio, lo perseguí y lo conseguí”

Gaspar Leveratto siempre supo que quería seguir el camino de su madre, que es abogada. Por eso, ni bien culminó la secundaria, este joven oriundo de San Nicolás se mudó a Rosario para estudiar Abogacía en la UCA, donde fue becado durante 4 años por mérito y donde se recibió con honores gracias a un promedio de 9,64.

La familia de Gaspar tiene una gran tradición académica. Su hermana mayor, Antonela, es contadora y fue medalla de oro de la Universidad Austral. Su otra hermana, Julieta, se recibió de ingeniera industrial con distinciones en la UNR y trabaja en Ámsterdam. Y su madre es abogada y asesora de menores en San Nicolás. Leveratto subraya el sostén que le brindaron sus padres: “No podría haber hecho nada sin su apoyo, tanto desde lo económico como desde lo afectivo”.

Respecto al vínculo entablado con sus compañeros de facultad, el nicoleño enfatizó: “La relación con ellos fue espectacular y muy importante. Hago mención a quien era mi mejor amigo, Gastón Censi, con quien estudié los primeros cuatro años y falleció en un accidente automovilístico. Más allá de la tristeza y el dolor, fue muchas veces el motor para seguir adelante”.

¿Cuántas horas diarias estudia un cuadro de honor? Gaspar indicó que ello era relativo: “Durante la cursada eran unas 6 horas por día, que aumentaban en época de parciales. Pero lo fundamental se daba durante la época de finales, ahí eran 12 horas”.

Gaspar se recibió el 10 de marzo de 2022. Enseguida se fue a Buenos Aires para trabajar en el estudio jurídico Allende y Brea y comenzó una maestría en derecho y economía en la Universidad Di Tella. Se convirtió en profesor adjunto en la UBA y en el futuro aspira a estudiar un posgrado o una maestría en el exterior “para lo cual tengo que seguir formándome y trabajando acá”, sentenció.

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