Toma forma el proyecto para levantar nueva nave en el Polo Tecnológico

Va tomando forma el plan para sumar una tercera nave en la Zona I del Polo Tecnológico. El viernes pasado el gobernador Omar Perotti visitó el predio y se otorgaron aportes por $14,3 M para la ejecución del anteproyecto. En la estimación global se calcula un desembolso que girará en torno a los u$9 M, aunque ese número podría variar de acuerdo al instrumental que se incorpore teniendo en cuenta que este nuevo edificio albergará a firmas de base biotecnológica. 

“No podemos fallar en el anteproyecto y hay que pensar bien los espacios. No tenemos tanta referencia en nuestro país de cómo se maneja este tipo de infraestructura. Este Aporte No Reembolsable (ANR) de $14 M viene para ejecutar el plan de crecimiento de la Zona I y antes de que termine el año la empresa arquitectónica tomará el anteproyecto que armamos y lo llevará a la realidad del proyecto listo”, explicó a Punto biz Ignacio Sanseovich, presidente del Polo Tecnológico. Lo cierto es que para arrancar con la obra deberá tener primero el ok de Nación, además de avanzar con la búsqueda de fuentes de financiamiento. 

El monto es elevado porque el edificio estará equipado con “componentes de innovación de alta tecnología”, los cuales cotizan en moneda extranjera. Trabajan con parámetros muy referenciales y la infraestructura biotecnológica que se agregue aumentará sin dudas su costo. “La obra tiene un financiamiento alto porque no es solo poner en valor el edificio, sino generar también espacios inteligentes para una nueva fase software+bio”, precisó. La gobernanza del complejo estará compartida entre municipio y provincia. 

La fachada tendrá características similares a las otras dos naves que ya están operativas en el predio de 30 hectáreas del ex Batallón 121 porque es patrimonio histórico, pero la diferencia radica en el interior al no tratarse de firmas IT tradicionales. Estará dispuesto el edificio en dos plantas: un piso de oficinas y otro de laboratorio, aunque además habrá algunos puntos comunes a todas las empresas para recepción de proveedores, mercadería, depósito o cámaras de frío. La idea es reproducir un esquema con áreas de genómica, biología molecular y estudio de proteínas. 

Este tercer edificio será el broche final para poder dar por culminada una de las áreas más pujantes que tiene el Polo Tecnológico desde que comenzó su transformación en 2013. Si bien por el momento hay solo dos biotecnológicas operando -Cibic y BioHeuris-, la idea es contar con entre 10 y 20 nombres en este nuevo espacio. “La demanda es alta. Si hay empresas que puedan acomodarse con un metraje menor, eso permitirá sumar un mayor número. En el momento en que ya lo tengamos disponible para ofertar, ahí veremos qué equilibra la balanza”, confió Sanseovich. 

Hoy el estadío es de anteproyecto, pero hasta que no empiecen a trabajar en ladrillos se mantiene cauto con respecto a la receptividad del cliente. Sanseovich detalló que el objetivo es que "esta nave sea un espacio común para que una firma que tiene que pasar del mundo académico y que ya investigó, no tenga que tener un costo de infraestructura y pueda utilizar el equipamiento dispuesto”