Llevan la industria en la sangre, abrieron fábrica propia y ahora la amplían

La planta de Carlini Hnos. está en pleno crecimiento. Vienen de sumar, meses atrás, 700 m2 al área de mecanizado de su fábrica de envasadoras automáticas y semiautomáticas y ahora instalaron un nuevo galpón para instalar el sector pintura. El objetivo es integrar la totalidad de la producción en su planta de Pueblo Esther, que cortó cintas en 2022. 

Pero si bien la fábrica es nueva, los hermanos tienen décadas de experiencia en el rubro. “Tenemos 30 años como fabricantes de maquinaria, nuestra familia se dedicó siempre a eso. Ahora, junto a  dos de mis hermanos, hacemos lo que siempre hicimos, pero en nuestra propia fábrica y con nuestra marca”, contó Pablo Carlini a Punto biz.    

Fabrican envasadoras automatizadas de productos granulados, en polvo, líquidos y semilíquidos. También enfardadoras, agrupadoras y cerradoras. “Hacemos máquinas a la medida de la producción de nuestros clientes. Son equipos que resuelven todo el proceso de envasado, con software propio. Atendemos tanto a un productor para el envasado para exportación como a una industria alimenticia que fabrica lentejas, budines o snacks”, detalló el industrial.

Las envasadoras pueden trabajar a diferentes velocidades según el producto: legumbres y azúcar hasta 60 envases de medio kilo por minuto, harina de trigo, hasta 30 envases de un kilo por minuto, dulces de batata o membrillo, 30 envases por minuto. También fabrican envasadoras para emprendedores que manejan menos volumen de producción.  

Queda todo en familia

Actualmente, la fábrica de Carlini totaliza 2.000 m2. “El plan es ir integrando todas las partes de la producción que veníamos tercerizando, hacerlo todo nosotros, que es la manera de ser más eficientes y ser competitivos. Ya incorporamos la fabricación de piezas de tornería, el mecanizado, y el próximo paso es instalar las cabinas de pintura”, concluyó el industrial.