El pub cervecero más rockero de Pichincha abre su propio "club"

Growler Garage plantó bandera en Rosario en 2018 con un negocio disruptivo para la ciudad: un bar bien rockero de recarga de botellones (growlers) de cerveza. Conservando el estilo de pub-garage, abrieron después Growler Vol.2 (Pichincha) y Growler Vol.3 (Funes) -los dos locales hoy operativos-, e incursionaron en el rubro cafetería con Growler Garage & Café. La nueva unidad de negocios se llamará Club Growler, fusionará los conceptos "día y noche" e incorporará coctelería de autor, pero siempre manteniendo los lineamientos de marca. 

El lugar elegido para el desembarco es el inmueble en el que hasta hace poco funcionó The Var y más atrás en el tiempo Ruta de Especias (Jujuy entre Entre Ríos y Corrientes). El edificio está montado en dos plantas y tendrán dinámicas diferentes, la terraza con una impronta más descontracturada. ¿Un plus? Growler Away, una ventanita separada del local para que puedas pedir y seguir tu camino. “La idea es intentar otra vez otra cosa. Nos gustó la zona porque tiene mucho potencial, aunque no está tan explotada gastronómicamente”, refirió a Punto biz Franco Tosto, uno de los gerenciadores del espacio junto a Ignacio Righi y Guillermo Frisco. 

“La idea es abrir a mediados de agosto. Se va a explotar todo el espacio, arriba y abajo, que suma en total más de 100 m2”, precisó. Aparte del café, la cerveza y la sandwichería clásica del lugar, el menú sumará platitos de noche con -por ejemplo- espárragos, helados artesanales de Bocha y coctelería de autor. De hecho, preparan una carta especial con tragos superadores al tradicional gin tonic, vermú o negroni. Uno de los puntos fuertes del negocio es que está frente a un pulmón verde -el Parque España-, un poco la filosofía que han adoptado para sus aperturas.  

También se la juegan por una propuesta diferente en cuanto a lo estético: “La idea es que tenga un mobiliario que no esté en Rosario. Fuimos a buscar una marca distinta a Buenos Aires y va a ser algo más jugado para salir de lo tradicional, con sillas cromadas y mesas más grandes. Tendrá además una parte en madera con almohadones, va a ser algo bastante ecléctico”, disparó Tosto. La esencia de Growler se mantendrá en esta nueva ubicación, fusionando conceptos y experimentando con cosas nuevas . Después de que bajaran las persianas del Growler original de Brown al 3000, surgió la idea y todo se fue complementando. 

El negocio del café 

Growler redobló la apuesta y en estos años se metió de lleno también a competir en el rubro del café. Tienen dos locales de Growler Garage & Café -Moreno al 1800 y Vía Vieja-, y hace poco cortaron cintas de Colegio, en el bar del Colegio de Arquitectura y Urbanismo (Belgrano al 600). “Tiene otro nombre, pero es administrado por nosotros con la idea de proveer los servicios y productos de Growler Café. Queremos brindar algo distinto, pero que se mantenga dentro de nuestro hoja de ruta”, puntualizó.