Después de varios intentos frustrados para vender la compañía en default, el directorio de Trechel (Bodegas Litoral SA) avanzó con la presentación de requisitos pendientes y la Justicia provincial formalizó la apertura del proceso de quiebra de la firma que dejó de operar en marzo. Los intentos del personal por conformar una cooperativa cuentan ahora con un espaldarazo tras la puesta en marcha proceso de liquidación del activo de la empresa desde el pasado 3 de julio.
Casi en simultáneo con el cese de la producción, fue el 19 de marzo pasado que los accionistas de la fabricante de jugos concentrados se presentaron en el palacio de los tribunales provinciales para solicitar la “propia quiebra”, pero los intentos de los trabajadores por mantener la fuente laboral y la posibilidad de la llegada de algún comprador capaz de afrontar las deudas, demoraban la apertura formal de la quiebra.
“No está decretada porque los abogados de la firma deben contestar una serie de oficios que hemos ordenado”, había mencionado en abril a punto biz la jueza de Primera Instancia en lo Civil y Comercial de la 4ª Nominación de Rosario, Silvia Ana Cicuto. Tras caerse toda alternativa de venta, se presentaron los escritos necesarios y la magistrada abrió el trámite, precisaron fuentes vinculadas al juzgado.
El pronunciamiento del tribunal fue a comienzos de mes, y con la feria judicial en medio, poco se pudo avanzar con las instancias que demanda el proceso. Con la designación de los síndicos como primera medida, el objetivo es el de precisar el pasivo y establecer un orden de prioridades para cumplir con cada uno de los acreedores.
Cooperativa con fuertes desafíos
Beneficiados con la sanción de la Ley de Quiebras, los 25 operarios de Trechel esperaban el inicio de la maquinaria judicial para que se les hiciera más sencillo el camino hacia la conformación de la cooperativa de trabajo. De hecho ahora aguardan por obtener la matrícula que los habilite a funcionar en pleno.
Lo cierto es que de cristalizarse el futuro cooperativo, la nueva conducción basada en la economía social deberá lidiar con un mercado de bebidas muy competitivo, escenario que terminó perjudicando Bodegas Litoral ahora en quiebra. Básicamente la falta de fondos para invertir en nueva maquinaria y así jugar en primera con mercadería que tiene alta demanda, tal el caso de los juegos en polvo, fue uno de los aspectos que los accionistas de la firma en default esgrimieron al momento de presentarse ante la justicia y será un objetivo fundamental para el plantel laboral una vez que se enciendan las líneas de producción.
