Los 7 mejores revestimientos de pared para exterior e interior

Construir una casa es un trabajo arduo y emocionante, aunque sumergirse en el mundo de la construcción puede parecer abrumador ante las importantes decisiones a tomar. Pero, sólo es necesario recurrir a expertos e informarse sobre los materiales más apropiados para lo que desees hacer. Por ello, en este artículo te detallaremos cada tipo de revestimiento de pared que recomiendan los que saben del tema.   

El revestimiento de pared es una capa que cubre la superficie, cuya función principal es conservar los muros y paredes. Además, estéticamente aporta textura y color que va a ir dependiendo del tipo de material que cada uno elija.    

En Familia Bercomat podrás encontrar una gran variedad de revestimientos. Aprovecha las increíbles promociones de la Feria de la Construcción, que estarán vigentes hasta el domingo 19 de diciembre. 

Revestimiento exterior de pared

Es importante seleccionar adecuadamente el revestimiento exterior dado que recubren las paredes que están expuestas al sol, las tormentas y el viento.   
Algunos de los más elegidos son:  

- Piedra: el revestimiento de piedra para pared tiene como ventaja ser un material muy resistente al desgaste, cambios bruscos de temperatura, humedad o golpes y rayaduras. 

Su durabilidad es el beneficio principal por el que es muy elegida para los frentes de las casas. La piedra natural es un material sostenible, son orgánicas y no ocasionan ningún daño al ambiente. En caso de querer realizar una refacción, pueden ser reutilizadas en otro proyecto. Por último, aportan un nivel de aislamiento tanto térmico como acústico, óptimo.

- Madera: al igual que la piedra, este material es aislante térmico por lo que en verano mantiene fresca la casa y en invierno el ambiente cálido. Muchos la eligen porque aporta un estilo característico, pero es necesario aclarar que necesita mucho mantenimiento para evitar que se arruine y permanezca resistente. 

Su versatilidad se adapta a distintos gustos y tipos de casa. Otro punto a favor es que es menos costoso que otros revestimientos. A diferencia de la piedra, es sensible a los cambios climáticos como la humedad o el sol, y es altamente inflamable por lo que si vives en zonas de incendios no es lo más recomendable. 

-Ladrillo visto: si bien actualmente parece “pasado de moda”, sigue habiendo personas que lo eligen por crear un frente pintoresco y clásico. Su gran beneficio es que no necesita mantenimiento por lo que no debes estar pendiente de su cuidado y resiste diferentes tiempos climáticos. 

Está elaborado con arcilla por lo que no contiene sustancias tóxicas ni sintéticas, y en casos de incendio no produce gases perjudiciales. 

-Hormigón: sin dudas es el material que marca tendencia y el más elegido por los arquitectos con estilo moderno. En resumen, se puede decir que requiere un bajo mantenimiento dado que no se deteriora con el tiempo y es muy fácil de mantenerlo limpio. 

Su instalación es muy rápida y, además, es un material muy económico porque se compone con agua, áridos, pigmentos o cemento. También es conductor térmico, aislante acústico y de los más seguros en casos de incendio.

Revestimiento interior de pared 

El recubrimiento de paredes puede variar según los gustos de cada uno. Es algo más bien subjetivo, pero es importante evaluar todas las opciones disponibles y cuál se adapta más a lo que cada persona tiene en mente. Veamos algunos ejemplos:   

- Mármol: si está dentro de tu presupuesto, es una opción más que sofisticada y elegante. Es clásico y duradero. 

- Metal: va de la mano del estilo industrial que muchos jóvenes eligen para sus casas o departamentos. Rompe con lo clásico y combina perfecto con el hormigón.

- Papel: si bien no es una opción novedosa, es importante evaluar las distintas alternativas que existen y ver los diseños actuales, ya que te pueden llegar a sorprender. 

Puedes optar por pintar tres paredes de una habitación y aportar algo distintivo en la cuarta pared con tu motivo favorito.