Fertilizantes más caros por el conflicto entre Israel e Irán

El conflicto entre Israel e Irán no solo sacude al mercado energético y financiero, sino que también empieza a golpear a otro sector clave para la seguridad alimentaria global: el de los fertilizantes.

Según un informe reciente, los ataques y el aumento de la tensión en Medio Oriente ya están provocando un alza en los precios internacionales de la urea, insumo esencial para la agricultura. Si bien no se registraron daños directos en las plantas de producción de fertilizantes, los efectos indirectos son inmediatos.

Egipto en el centro de la atención

Egipto, uno de los principales exportadores de fertilizantes nitrogenados, detuvo su producción de urea por la reducción del suministro de gas natural proveniente de Israel.

En Irán, las tensiones geopolíticas también afectaron la producción de nitrógeno, y muchos proveedores decidieron suspender sus ofertas hasta tener mayor claridad sobre el desarrollo del conflicto.

La situación genera preocupación especialmente en Brasil, uno de los mayores importadores de fertilizantes del mundo, que ya observa con atención la evolución de los precios y el abastecimiento.

Tomás Pernías, analista de StoneX Market Intelligence, explicó que si bien no se registraron daños directos en las plantas de producción de fertilizantes, los efectos indirectos son inmediatos.

El impacto del conflicto entre Israel e Irán también se extiende al transporte y la logística global. El aumento del precio del petróleo, intensificado desde el inicio de las hostilidades, podría traducirse en un encarecimiento de los costos del transporte marítimo y terrestre.

Esto no solo complica las rutas comerciales, sino que agrega presión adicional sobre los costos de importación de insumos clave, como los fertilizantes.

Brasil, uno de los principales importadores de fertilizantes nitrogenados del mundo, observa con preocupación este escenario.

La volatilidad de los precios internacionales, potenciada por la incertidumbre geopolítica y los mayores costos logísticos, amenaza con elevar los costos de producción agrícola y reducir los márgenes de los productores.

Aunque el impacto total sobre los precios de la urea en Brasil aún no se consolidó, los analistas advirtieron que el momento es adverso para quienes aún no concretaron sus compras.