"Hay buenos precios y el nivel de ventas del agro va a repuntar en junio"

La liquidación de divisas del agro sigue a paso lento. Al mismo tiempo, se incrementó el precio de la tonelada de soja y maíz. En diálogo con el programa radial Base de datos (lunes a viernes de 10 a 12 hs por FM Meridiano 107.1), Dante Romano, consultor y analista del mercado de granos o sector, trazó un panorama del sector y lo que viene. 

- El 36% se vendió de la campaña, menos que el año pasado. ¿Qué es lo que está pasando?

- Venimos arrastrando un retraso que se dio en la venta anticipada de la cosecha. Si bien el productor argentino usualmente no llega con más del 15% o 20% vendido al momento en el cual llega la recolección, este año llegamos a 2% o 3%, muy poquito. Eso se dio primero porque cuando estábamos en época de siembra de la campaña gruesa, lo que es maíz y soja, teníamos la duda de si llegaban las lluvias o no. Después las lluvias llegaron, pero estábamos con todas las dudas del proceso electoral. En ese momento había precios interesantes, pero estaba la duda porque no se sabia si se continuaba con los dólares agro, no se sabía si iba a haber alguna quita en derechos de exportación o inclusive algún aumento. Y toda esa incertidumbre fue paralizando al hombre de campo. Y finalmente cuando se hizo claro cómo venía la mano, tuvimos desde diciembre hasta marzo una caída muy marcada, la soja pasó de u$s350 a u$s270 por tonelada. Quedamos en valores que no eran rentables, entonces tuvimos ese factor de atraso inicial. Cuando arrancó la campaña y se empezó a trillar, los productores no vendían, quienes compran esa mercadería, los exportadores, no podían enmarcar esos granos y por tanto no podían tampoco tener las divisas, lo que trabó toda la situación. Después se sumó la lluvia en la cosecha, abril fue un mes muy lluvioso e hizo que la cosecha avanzara con lentitud. Eso hizo que fueran lentas las ventas y las entregas de mercadería. Cuando vemos lo que pasó en las últimas semanas de mayo, hubo semanas de récord de ventas a precio. Abril fue muy flojo en lo que es ventas a precio de productores, pero mayo fue muy bueno, terminó arriba de las 5 Mt de ventas a precio. Se achicó mucho la brecha que tenemos entre lo que es normal en esta época del año y lo que se vendió a precio. Hoy estamos en un 18% vendido con precio contra un 26%. Esta información que te doy, que es hasta el 22 de mayo, si vos vas siguiendo por Sio Granos cómo van avanzando las ventas, en los días siguientes de mayo se vendió muchísimo. Esto se debió a varios factores. Por un lado, al 30 de mayo hay vencimientos muy fuertes en cuestiones financieras y comerciales de los productores, que tienen que pagar insumos de la campaña anterior. Adicionalmente, los precios internacionales tuvieron una mejora inesperada por las inundaciones en Brasil. Y esto se combinó con la brecha entre el CCL y el tipo de cambio oficial, 20% de esa diferencia engrosa el precio que puede recibir el productor. Esos factores hicieron que la soja volviera al valor de u$s330, con un nivel de ventas muy interesante. Y permitió que el gap que estábamos teniendo se achicara mucho. Estas son buenas noticias. Vamos a notar mayor ingreso de divisas. Pero no llegamos a normalizar porque la situación inicial de demora en las ventas del forward las seguimos teniendo.

- Eso genera una situación de retraso global que es muy difícil de recuperar 

- Sí. Lo que pasa es que el productor va a tener que generar medios de pago para cubrir vencimientos. El vencimiento del 31 de mayo ya está, el 31 de junio tiene otro vencimiento. Los precios se mantienen en niveles interesantes, por lo que creemos que en junio vamos a seguir teniendo un nivel de ventas bueno, y se va a ir achicando la brecha. No vamos a llegar a niveles históricos, pero la foto que teníamos hace dos semanas era pésima, porque la gente no vendía. Eso cambió mucho en las últimas dos semanas y genera una expectativa de que vamos a estar mejor. 

- ¿Este esquema de ventas es irrefrenable?

- Yo creo que vamos a seguir teniendo niveles importantes de ventas. También es saludable que el mercado tenga un movimiento de serrucho, porque cuando solo sube, la gente se queda esperando hasta último momento para ver qué pasa. Si el mercado en su volatilidad hace una pequeña suba, eso demuestra que sos mortal y que los precios pueden bajar, y si tenés vencimientos cerca, te obliga a aprovechar para hacer fijaciones. Nosotros vimos una soja de u$s270 y un maíz de u$s150, y hoy tenés una soja de u$s350 y un maíz de u$s180 y u$s190. Son valores que vuelven a ser rentables, y esto no está escrito en piedra, los mercados son muy volátiles, los precios así como suben pueden bajar. Ahora la cosecha norteamericana viene muy bien y está generando esta baja que vemos en estos días. 

- Uno ve a los exportadores muy enfáticos a la hora de valorar el cuadro de situación. ¿Esperaban un dólar más alto o tienen razones para quejarse? 

- Lo que ocurre es que en lo que es soja, somos un exportador de harina. Las fábricas que tenemos instaladas en el Gran Rosario muelen 150.000 toneladas diarias de soja, con lo cual los compradores necesitan que les entre mercadería para que las fábricas no paren, y necesitan contar con stock de seguridad. Por otro lado, necesitan tener fijaciones de precios para saber: "Si voy a vender el aceite y la harina, necesito saber a cuánto compré la materia prima, para ver si el negocio cierra o no y con cuánto cierra". Hay dos problemas, uno es conseguir mercadería, ya sea fijada o a precio, y el otro es la venta a precio. Cantidad de mercadería hoy hay, la molienda viene trabajando a niveles normales, el gran problema es que no hay suficiente cantidad de venta a precio. Esto genera intranquilidad. Además, los exportadores están en el ojo de la picota, porque el Gobierno les dice que liquiden, y el exportador responde: "Si no compro a precio, no puedo vender, y si no puedo vender sería irresponsable tener divisas si no tengo dónde aplicarlas". Es una situación donde si el productor no vende, se traba toda la rueda. Y a tal punto sucede esto que los exportadores de poroto y aceite de soja argentino, al no estar vendiendo al resto del mundo, generan que los precios internacionales empiecen a calentarse. Y vemos que empiezan a aparecer estos niveles de venta, que empiezan a mover un poco todo esto. Pero no creo que lleguemos a los valores que se habían proyectado, que normalmente tenemos al 30 de junio para ver cuánto va a ingresar.

- ¿Cómo ves las decisiones de inversión del hombre campo en relación con los cultivos de invierno?

- Tuvimos esta suba de precios, que en el caso del trigo pasó de u$s180 a u$s260 por tonelada la semana pasada. Tuvimos una baja puntual en el último tiempo, pero bajó un 7%, o sea que en el medio terminamos mucho más arriba que lo que estábamos cuando comenzamos a mirar los valores del trigo, que es lo que se está sembrando en este momento. En el medio, las lluvias de abril generaron una muy buena reserva de humedad. Y los insumos habían bajado bastante, y al subir el precio del trigo, la relación entre el grano de trigo y el insumo que se utiliza para producirlo, lo que llamamos relación insumo-producto mejoró significativamente. Esto cambió la cara de los productores, están con muchas ganas de sembrar, las condiciones climáticas lo permiten y se está moviendo fuerte. Yo creo que estamos para generar entre 18 y 20 Mt en esta campaña de trigo que está comenzando y que se va a trillar entre noviembre y diciembre. Hay muy buenas expectativas. Y después, hacia adelante, la combinación de trigo-soja está dando muy bien, el margen del maíz no está tan claro, pero falta mucho para tomar esa decisión, y la expectativa de los productores es que en algún momento, los costos de los fertilizantes puedan tener alguna reducción, dado que a nivel internacional lo van teniendo. 

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