Eugenio Malaponte: "No seremos ni cómplices ni inútiles"

“Rosario pasó de ser 'la ciudad más linda para vivir' a un ícono mundial de violencia, narcotráfico e inseguridad. ¿Qué pasó en el medio?”, se preguntó en una entrevista exclusiva con Punto biz el precandidato a intendente Eugenio Malaponte. En esa línea, el referente rosarino del espacio que encabeza Lilita Carrió, identificó algunos elementos claves que explican el auge de la inseguridad en Rosario.

En primer lugar, destacó el crecimiento desmedido de la ciudad después del boom de la soja, que llevó a la expansión urbana más allá de los límites establecidos. Para él, esta falta de planificación y de infraestructura adecuada resultó en un aumento de la marginalidad y la pobreza, lo cual fomentó el crecimiento del crimen.

En segundo lugar, el precandidato invocó el papel de los puertos de Rosario y sus alrededores como punto de salida de drogas hacia Europa. Este hecho financió a las bandas locales y les otorgó protección. Sin embargo, recalcó que estos dos elementos no son exclusivos de Rosario, ya que otras ciudades argentinas también los comparten sin tener los mismos problemas de seguridad. Es aquí donde entra en juego el tercer elemento fundamental: la relación entre el Estado y el delito.

“Cuando el Socialismo asumió el gobierno provincial en 2007, tomó una decisión trágica para Rosario: asociarse con las incipientes bandas criminales a cambio de sobornos que eran cobrados por la policía y entregados a la política. Esta alianza permitió el financiamiento de millonarias campañas electorales que han mantenido a este espacio político en el poder hasta el día de hoy”, manifestó.

“Con esta ventaja, las bandas criminales crecieron respaldadas por el Estado, adquiriendo armas, logística y conexiones internacionales. A medida que crecieron demasiado, comenzaron a chocar entre sí por el control de territorios, lo que llevó a un aumento drástico de la inseguridad en 2013, un año crucial en la historia de Rosario”, agregó.

Mencionó además hechos como el asesinato del líder criminal conocido como "Pájaro" Cantero y el surgimiento de Los Monos, quienes sembraron la ciudad de cadáveres en venganza por la muerte de su líder. Además, enumeró casos de corrupción y nexos entre políticos y narcotraficantes que salieron a la luz durante ese período.

Malaponte también destacó otros factores que complicaron la situación, como la corrupción en el ámbito legislativo provincial y el papel de la Policía. “Los legisladores provinciales recibieron grandes sumas de dinero 'en blanco' mensualmente, generando una cofradía entre ellos y abriendo la puerta a actividades ilegales a cambio de protección. Además, la policía, en lugar de combatir el delito, se involucró en él, convirtiéndose en un cártel narco que colaboraba con el tráfico de drogas”, aseguró.

Ante este panorama desolador, afirmó que tiene sólidas propuestas para combatir la inseguridad en Rosario. En primer lugar, destaca la necesidad de desmentir la idea de que la Municipalidad no tiene potestad en materia de seguridad, ya que garantizar la seguridad es una responsabilidad tanto del Estado nacional, provincial como municipal.

El precandidato enfatizó la importancia de actuar sobre las causas fundamentales de la inseguridad, entre ellas, la limpieza de la política. En ese sentido, propuso democratizar la ciudad, prohibir la cartelería política, garantizar la transparencia en el gasto público y combatir de manera firme a narcotraficantes, políticos corruptos y jueces cómplices.

Malaponte apuntó además a crear una Secretaría de Seguridad encargada de monitorear denuncias sensibles relacionadas con la seguridad de la ciudad, así como llevar a cabo informes estadísticos sobre el delito. Además, planteó una modernización de la Municipalidad mediante auditorías con empresas privadas y universidades, reemplazando funciones redundantes por tecnología. También se comprometió a reducir gradualmente el número de empleados municipales para garantizar un uso eficiente de los recursos.

El precandidato subrayó la importancia de devolverle a Rosario “su esplendor y orgullo”, promoviendo el arte, la cultura y embelleciendo la ciudad.

Finalmente, consultado sobre sus perspectivas para el domingo, Malaponte expresó su confianza en quedar en la general y competir contra otros candidatos, como Pablo Javkin, Roberto Sukerman y José Luis Tessandori. Destacó a su vez sus diferencias con los demás postulantes y su determinación de liderar a la ciudad que ama, comprometiéndose a mejorar la vida de los rosarinos.

Sobre sus contrincantes, aseguró que “le va a ganar a cualquiera”. “Javkin es el pasado, es un tipo honesto pero hizo la peor intendencia de la ciudad desde el retorno de la democracia. No tuvo ni tiene el coraje para realizar ningún cambio, y la realidad se lo llevó puesto”, arremetió contra el actual intendente de la ciudad que va por la reelección. “Tessandori parece buen tipo, pero viene de afuera de la política e hizo una alianza con Pullaro, al que yo considero lo peor de la política, lo que hay que dejar atrás”, sumó.

Sobre Pullaro, apuntó los dardos y en línea con las acusaciones vertidas por Carolina Losada y Patricia Bullrich, lo responsabilizó por la narcopolicía luego de actuar por negligencia o por decisión propia. “Si gana la provincia podemos ir a la situación que vive México.Y ahí va a ser más importante todavía el líder que guíe a la ciudad y evite ese camino”.

En cuanto a Sukerman aseguró que “lo respeta”, aunque consideró que traer al kirchnerismo a la ciudad para que resuelva éste problema, es como querer apagar el fuego con un balde de nafta. “Es mi momento, el momento de liderar a la ciudad que amo, la ciudad en que nací. Me propuse mejorar la vida de los rosarinos, y voy a dejar la vida por lograrlo”, finalizó.