Caso Sarjanovic: el negocio que se complicó antes del crimen

La voluminosa deuda que mantenían Virginia Carolina Seguer y su madre Alicia Fernández con el empresario Diego Sarjanovic estuvo desde el principio en el centro de las investigaciones del asesinato del viernes 4 de setiembre último, que tiene a las dos mujeres como imputadas.  

De acuerdo a las pruebas recogidas por los fiscales que intervienen en el caso, Sarjanovic le había prestado a Seguer unos $ 400.000 y trataba que les fuera devuelto, porque el gerente de MC Catering había asumido con su propio riesgo compromisos frente a terceros y veía comprometida su propia situación financiera. Ese era el trámite que Saguer se había comprometido a finiquitar en la mañana de aquel viernes con la venta de un fideicomiso inmobiliario, luego de que un supuesto robo jamás denunciado había impedido hacerlo dos semanas atrás. 

El préstamo había sido para potenciar un negocio del rubro textil del que hasta ahora poco y nada se supo. La supuesta amante de Sarjanovic se había inscripto como autónoma para operar en el rubro textil en junio de 2013, y a pesar del auxilio financiero de Sarjanovic no le iba nada bien: según el Banco Central de la República Argentina (BCRA), durante el último año emitió 34 cheques por una suma total de $329.332 que fueron rechazados por falta de fondos, y acumula deuda bancaria por otros $294.700 a julio de 2015.

Lo delicado de la situación financiera de Saguer seguramente fue la causa que motivó la creación de Bastet SRL, una firma que en los registros provinciales figura a nombre de su madre Alicia y de su hermana menor, María Florencia y cuya constitución oficial fue el 29 de julio pasado. Trabajaban por catálogo por medio de distribuidores, aunque también efectuaban ventas directas hacia boutiques,

Por su reciente formación, no figuran  datos de Bastet en registros financieros públicos, pero la firma sí cuenta con un sitio web que aún permanece activo, donde se puede observar un catálogo para la temporada de primavera verano y solicitar mercadería online. 

Allí también se indica una sede sobre avenida Pellegrini 1487 en el que funcionaba el taller de confecciones y la administración de Bastet. En ese lugar cumplieron funciones siete trabajadoras hasta cuando se produjo el crimen, quienes no habían sido legalmente registradas. 

Aunque los cheques voladores de Saguer son de más larga data, los problemas financieros trascendieron en el taller recién quince días antes del asesinato de Sarjanovic, cuando se enteraron del supuesto robo del dinero supuestamente destinado a saldar deudas. 

Ahora las operarias están buscando un nuevo empleo. Quién apareció ante ellas  fue María Florencia, que figura como socia de la SRL, para prometer que los salarios de agosto serán liquidados, aunque el compromiso es sin fecha.