Apuestan a una liga de marcas locales para reactivar Falabella

La decisión del holding chileno Falabella de hacer las valijas e irse de la Argentina, no solo cayó como baldazo de agua fría para los más de 100 empleados que quedaban en la sucursal Rosario, sino que también impactó en el empresariado mercantil del centro de la ciudad, por el efecto que derivará del cierre del mítico palacio de La Favorita en la esquina de Sarmiento y Córdoba.

Es que a la ya afectada circulación de gente sobre las peatonales y sus adyacencias en la post pandemia, el cierre de la tienda con origen trasandino desactiva un fuerte imán de público en el sector. Frente al panorama gris y a la par del reclamo al Municipio por medidas que fomenten las compras en el área histórica, los comerciantes ya proponen una salida para el edificio que ahora quedará de nuevo bajo el control de la familia García -fundadores de la extinta La Favorita y dueños de la llave del inmueble-.

“El cierre de Falabella es un golpe tremendo para el centro. La tienda tiene una atracción especial y fomenta la circulación por lo que ahora necesitamos una solución en el corto tiempo para que el edificio no quede cerrado”, expresó Juan Benzi, titular de la cadena de jugueterías Gulliver y una de las figuras más representativas de la actividad comercial dentro de los bulevares.

En declaraciones a Base de Datos (FM Meridiano 107.1 de lunes a viernes de 10 a 12), el empresario se incluyó en la posibilidad de “buscar inversores que podamos entre todos  encontrar la manera de gestar un espacio que replique los rubros que hoy tiene Falabella. Un pool que sea gerenciado por alguien conocedor del tema, creo que se puede hacer”.

“Si uno encuentra 6 o 7 marcas de prestigio y se recupera el nombre de La Favorita el esquema puede funcionar”, sumó Benzi, que habla ni más ni menos que de gestar un modelo que incluya los comercios locales más icónicos del rubro bazar, juguetes, indumentaria deportiva y electrónica para que ocupen cada nivel del inmueble. Hasta se atrevió a soñar un roof bar en el último nivel. “¿Por qué no pensar en un Rock and Feller 's para el piso superior?”, expresó.

Lo cierto es que para desarrollar el modelo de negocio hace falta la presencia de los propietarios del edificio, pieza del rompecabezas que hasta el momento no apareció en el escenario público. “Hay que ver qué actitud toma la familia García, dueña del espacio. Ellos han sabido administrar una tienda y podrían tranquilamente ser aliados en el proyecto. La Municipalidad también sería importante que preste colaboración no solo para mantener el edificio abierto, además para ayudar a recuperar el público del centro”, añadió Benzi.

En la misma sintonía que el dueño de Gulliver se expresó Nelson Graells, titular de la cadena Sport 78 y al frente de la Asociación Amigos de la Peatonal Córdoba. “En mi opinión es difícil encontrar otra tienda grande que quiera ocupar el lugar. Por eso, creo que tiene que haber distintos rubros. Por ejemplo, cuando cerró La Favorita, organizamos con una convocatoria a comerciantes que querían tener su espacio en el local, desde perfumería, juguetes hasta artículos para el hogar. Si bien es muy prematuro, podría ser una opción a analizar”, dijo a Punto biz.