La popularidad de los fondos de inversión

Si tienes una cantidad de dinero ahorrada y has estado pensando en cómo obtener beneficios con ésta, probablemente te hayas planteado distintas formas de inversión, pero como siempre sucede, resulta complejo decidirse por una cuando no se tiene experiencia en el mundo de las finanzas. Por ello, existen recursos como los fondos de inversión, que han conseguido popularizarse entre aquellos usuarios que dudan en qué invertir y, en consecuencia, buscan un método que les brinde múltiples opciones.

Así pues, un fondo de inversión consiste en invertir cierta cantidad de dinero en un determinado número de instrumentos financieros que son decididos por expertos del sector, por lo que pueden ser tanto bonos como acciones. Dado que existen distintos tipos de fondos, cada usuario invertirá un porcentaje más o menos mayor en cada instrumento, y por ende sus beneficios serán proporcionales. De acuerdo con Europa Press, esta forma de obtener ganancias tiene cada vez más éxito en España, ya que los fondos de inversión del país aumentaron 4.295 millones de euros el pasado mes de febrero.

Dicho crecimiento es una de las garantías de su eficiencia, pero teniendo en cuenta que nuestro dinero será depositado en distintas compañías, cabe preguntarse hasta qué punto son seguros los fondos de inversión. Por un lado, todos los mercados tienen altibajos, no obstante, las hipotéticas pérdidas se suelen recuperar a largo plazo. Asimismo, España cuenta con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la cual se encarga de que las condiciones de cada fondo se cumplan y por lo tanto cada inversor reciba su capital correspondiente cuando sea preciso.  

Aun así, para mayor seguridad, los interesados deben de conocer a la perfección cuáles son los métodos para formar parte de un fondo y cuáles son las entidades que se encargan de ello. Afortunadamente, esta labor es sencilla, pues la mayoría de los bancos tradicionales y las sociedades gestoras ofrecen este servicio. También es posible acceder a un fondo mediante brókeres, los cuales podemos definir como una entidad o compañía que sirve de intermediario entre su cliente y los activos en los que el último desea invertir. Tras decidirnos por un fondo, podremos escoger cuál es la estrategia que más nos conviene, que puede ser más o menos arriesgada y a corto o largo plazo.

En definitiva, los fondos de inversión son una excelente opción para diversificar la cartera de forma rápida y fácil, dado que no hemos de dedicar tiempo a buscar empresas que sean rentables. De este modo, podemos lograr que parte de nuestros ahorros se multipliquen con distintas técnicas, las cuales variarán en función de si queremos ganancias rápidas o si preferimos ser precavidos y optamos por esperar. A pesar de que los fondos tienen un mínimo riesgo, presumen de un notable prestigio, y si nos apoyamos de la opinión de expertos como los brókeres, tenemos más garantías de obtener beneficios con el fondo que escojamos.