Lograron saltar a la nueva fábrica pero tienen planes para la planta original

Cualquier industrial que intente describir el proceso de mudanza a un nuevo establecimiento, contará que se trata de un plan que está marcado por etapas que suelen ser por demás complejas. Si bien la fábrica de sembradoras Cele SRL no estuvo exenta de dificultades en el traspaso, los titulares de la firma que desembarcó en un predio de dos hectáreas en el Área Industrial de Armstrong, aseguran que todavía hay excusas para mantener algunas operaciones en el establecimiento original. De hecho, ya trabajan en un proyecto para darle un nuevo uso a las instalaciones que hasta hace poco seguían albergando el proceso de armado de sembradoras.

Aunque está en un entorno urbano, la planta original de Cele SRL todavía tiene margen para continuar operando sin perturbar a los vecinos. “Si bien el fichaje del terreno fue pensado para en el futuro evitar dificultades con una trama residencial que crece en Armstrong todavía estamos autorizados a funcionar en el sector original y en ese marco vamos a potenciar en la fábrica histórica el desarrollo de implementos de labranza, que fueron los que inicialmente produjo la empresa y que ahora están volviendo a ser demandados por los productores ante la proliferación malezas resistentes en los lotes”, sintetizó Hugo Leguizamón, titular de la compañía, en contacto con Punto biz.

“Hoy en la fábrica original quedan algunas piezas de depósito que la idea no es mudarlas, sino consumir esos insumos para el proceso de producción, hasta que la superficie quede vacía. Pero la hoja de ruta establece mantener operaciones de armado de implementos. Es decir que lejos de pensar en el cierre de nuestra sede inicial, el equipamiento que está dispuesto allí nos servirá para mantener y profundizar la fabricación de herramientas de labranza”, profundizó.

En cambio, en la nueva planta del polígono fabril con 7.200 m2 de nave más oficinas se concentrará el desarrollo de las sembradoras. “Los equipos de siembra demandan cada vez más tecnología. Yo digo que la sembradora es ahora como un centro de monitoreo y entonces en el nuevo establecimiento modelo buscamos aunar la fabricación de nuestro producto estrella, más el departamento investigación y desarrollo y las oficinas administrativas”, expresó.

Si bien ya operan en el nuevo espacio hay inversiones por delante. “Trabajamos en una nueva nave de pintura con nueva tecnología. Esperábamos tenerla terminada desde hace un meses. Pero el desembarco en el nuevo complejo fabril nos encontró con esta fase todavía en obra. Se trata de una superficie para el pintado de partes a través de un circuito en donde el elemento a recibir pintura está montado sobre perchas móviles. Es un mecanismo complejo que esperamos terminar para mitad de año”, expuso Leguizamón.

En 1976 fue Aldo Leguizamón, padre de Hugo, el que fundió Talleres Metalúrgicos Cele, primero desarrollando instrumentos de labranza como rastras y controladores de malezas, portfolio que se completó luego con las sembradoras, abarcando hoy la siembra de granos finos y gruesos, pero también alcanzando sembradoras móviles y con tecnología air drill.