La marca rosarina que se hizo fuerte en la costa ahora va por nuevo local

Fue en el 2008 cuando a Jonatan De París se le ocurrió empezar a confeccionar remeras para vender entre amigos. Después las ofrecía a tiendas y hoy, tras más de 15 años en el ruedo, la marca Dread cuenta con dos locales propios en Rosario (además de un depósito desde donde se distribuye a comercios multimarcas de todo el país) y se afianza con nuevos puntos en la costa argentina. 

Además del negocio que montó junto a su socio Martín Galimany en Chapadmalal, Mar del Plata fue el tercer destino elegido para llevar la marca a otro nivel.  "Mi socio y yo surfeamos y estamos muy vinculados a la naturaleza. Nos gusta conjugar la naturaleza y la playa como estilo de vida, y ese es nuestro concepto de marca", sostuvo De París en diálogo con Punto biz. El estilo surfer/skater que desarrolla Dread encontró rápidamente una amplia demanda -sobre todo en la costa- y la expansión no tardó en llegar. 

Los productos de Dread son 100% nacionales: la tela se compra en Buenos Aires y la producción se terceriza en talleres de Rosario y alrededores. La empresa tiene un volumen de producción de 25.000 prendas anuales contra las 100 con las que arrancó en la primera década de los 2000, que se caracterizan por el estilo y diseño. "Hace 12 años me asocié con Martín y entre los dos pudimos desarrollar la empresa y llevarla a otro nivel", aseguró De París. 

"Siempre tuvimos en claro que queríamos llegar con la marca a todo el país y que cualquier persona que quiera el producto, pudiera tener un acceso fácil y simple", resaltó. 

Hacen ropa y también casas 

Hace dos años, De París se mudó a Chapadmalal, ciudad balnearia ubicada a minutos de Mar del Plata, donde junto a la constructora de su hermano creó un complejo de tres casas de alquiler. 

"Esto surgió porque el negocio de la indumentaria es muy volátil y elástico por las distintas condiciones que generan los gobiernos en cuanto al consumo, entonces tenemos años de mucha demanda y otros de muy poca", señaló. Y amplió: "Vimos esta posibilidad para diversificar las inversiones y tener un negocio más estable". En 2025 abrirán otro complejo de tres casas, también en Chapadmalal, pero apuntado a parejas. Por eso no es casual que haya sido el segundo destino apuntado para un local de Dread. 

A mediano plazo, pretenden desembarcar en Brasil -en principio- como un nuevo paso para sus inversiones inmobiliarias, aunque no descartan abrir también un local de indumentaria.