John Deere invierte para fabricar “cosechadoras digitales” en el Gran Rosario

Todavía está fresco el desembolso por u$s15 M que John Deere destinó a la renovación completa de la planta de Pla (ahora Pla by John Deere) en Las Rosas el año pasado, pero la multinacional ya tiene nuevos planes para Santa Fe: ahora adecuarán su histórica planta de Granadero Baigorria y comenzarán a fabricar allí la nueva línea S7, una serie completa de cosechadoras de alta capacidad con tecnología última generación que la compañía traerá al mercado argentino. 

“Es una decisión importantísima, hablamos de trasladar la producción de toda su nueva familia de cosechadoras”, le dijo a Punto biz Fabricio Radizza, gerente de Ventas de la compañía, en el marco de Expoagro. Agregó: “Está previsto que la fabricación arranque a partir del segundo semestre, y las primeras máquinas van a estar disponibles en el mercado nacional a partir de septiembre”. 

El destino de la producción made in Gran Rosario será el mercado nacional, en tanto que, para el resto de Sudamérica, las S7 se despacharán desde la planta de Horizontina, Brasil. Desde la compañía mantuvieron en reserva cuál será el volumen producido en el Gran Rosario y tampoco develaron el monto de la inversión prevista para la adaptación de la planta local, que está emplazada en un predio de 60 hectáreas y lleva más de 65 años dedicada a la fabricación de maquinaria agrícola. 

Digital e inteligente

La nueva gama completa la oferta de John Deere en el segmento de equipos de cosecha de alta capacidad, apenas un escalón por debajo de la Serie X, posicionada entre las cosechadoras más potentes del mundo.

La Serie S7 reemplaza a los modelos de la anterior S700, con versiones que cubren un rango de potencia nominal que va de 334 a 543 CV, alcanzando en el tope de gama una potencia máxima de 617 CV.

Se presenta como una línea de “cosechadoras digitales” porque pone el acento en las tecnologías aplicadas a la automatización de los procesos de recolección de granos. “Son máquinas con inteligencia artificial. Tienen cámaras frontales que recolectan imágenes y las juntan con imágenes satelitales para predecir, en base al volumen o a la biomasa, el rendimiento del cultivo antes de que ingrese a la máquina. Así, la cosechadora regula el trabajo más rápido, ganás unos 4 segundos respecto de la versión anterior, que representa hasta un 20% adicional de eficiencia”, explicó Radizza.

Además, comentó que la nueva línea tiene un diseño totalmente renovado, una cabina más amplia y con mejor insonorización, además de una mayor capacidad de procesamiento y  un motor de 3,6 litros, que lo hace un 10% más eficiente en el consumo de combustible. 

“Incertidumbre con optimismo”

Consultado sobre las expectativas para el 2025, Radizza admitió que ve optimismo entre los jugadores del campo, quienes reconocen la existencia de una base económica más firme que en años anteriores. “Sin embargo, sigue habiendo incertidumbre sobre la evolución de la demanda. Nosotros tuvimos un buen 2024 después de la sequía, pero las ventas todavía están alrededor de un 20% por debajo del promedio de la última década. La expectativa es que a finales de año se hayan recuperado los niveles 2021/2022”, estimó el ejecutivo.   

En diciembre, John Deere bajó significativamente los precios de su maquinaria agrícola en el mercado argentino, tras la eliminación del Impuesto Pais. La nueva lista  incluyó reducciones de precios del 17,5% en caso de importadores y de entre el 6 y el 8% en fierros de fabricación nacional.