Invierten u$s4 M para sumar nave, integrar IA y competir en la liga mundial

En la trayectoria de las empresas familiares hay instancias decisivas que marcan un antes y un después en el negocio. En ese punto de transformación se encuentra Aceros Chubut, pyme rosarina especializada en la fabricación de alambres para todo el arco industrial, que emprendió un plan de profesionalización cabal de la compañía. 

Pusieron en marcha un plan de inversiones a tres años que totalizará unos u$s4 M y que reestructurará todo el proceso productivo. La hoja de ruta incluye ampliar el plantel de ingenieros, integrar inteligencia artificial, modernizar la plaza de maquinarias, sumar un patio de alambrón y levantar una nave de 10.000 m2, que se sumará a la superficie existente —unos 8.000 m2 dedicados a la fabricación en Bv. Seguí al 7000—. 

“La meta final es alcanzar un nivel de eficiencia productiva que esté a tono con la vara internacional y, a mediano plazo, duplicar el volumen de fabricación. Y lo vamos a lograr a fuerza de profesionalización”, señaló Román Hernández, director Comercial de la compañía fundada por la familia Callegari. Agregó: “Teníamos un plantel de 20 personas, ya sumamos unos 10 ingenieros en el último tiempo y el propósito es seguir sumando perfiles profesionales”.

También están modernizando la plaza de máquinas, con la adquisición de enderezadoras de alambre, conformadoras y máquinas de soldadura. “Ya estamos integrando IA a todo el proceso para tener datos en tiempo real de la producción. En una pyme familiar, los dueños tienen cada detalle de lo que pasa en la planta en la cabeza, entonces cuesta mucho delegar. Para poner en marcha un equipo profesional, necesitamos que todos los sectores tengan la información, contar con tecnología que anticipe fallas y monitoree la fabricación. En ese camino estamos”, señaló Hernández, que coordina el proceso de rebranding.   

Además, el proceso de cambio impulsa un reordenamiento de la planta. “Instalaremos un nuevo patio de alambrón, que es el área de depósito de nuestra materia prima, y modificaremos el lay out del taller”, detalló el gerente Comercial. Luego vendrá la construcción de la nueva nave y oficinas administrativas.  

“Esta inversión de la empresa es también una apuesta al futuro del país, porque nuestra actualidad no escapa al contexto de la industria nacional. Hoy estamos trabajando a un 50% de nuestra capacidad instalada, pero aún así creemos que la única manera de permanecer en el mercado y crecer es ser competitivos”, explicó Hernández.  

De menos a más

La familia Callegari plantó la semilla de Aceros Chubut en 1975 como Industria Metalúrgica Chubut de Osvaldo Callegari. Fabricaba por entonces pinzas para máquinas de soldar por arco en calle Paraná.

En la década del '90 vieron la veta en el alambre y formalizaron la compañía actual, que trabaja para industrias tan disímiles como construcción, línea blanca, línea calor, agroindustria y da sus primeros pasos en Vaca Muerta. 

Sus productos llegan a todas las provincias argentinas y, a partir del actual proceso de profesionalización, la idea es reposicionarse en Latinoamérica.