Fracaso de Vicentin para intentar conseguir más fasones

En un nuevo intento por salir del estancamiento productivo con plantas cerradas y argumentando no tener espalda para pagar sueldos, el directorio de Vicentin convocó a representantes de empresas vinculadas al sector agroindustrial para explorar la posibilidad de establecer nuevos contratos de fasón que permitan reactivar sus establecimientos paralizados. Sin embargo, la reunión concluyó sin resultados positivos: ninguna de las firmas participantes presentó propuestas concretas que permitan una reanudación inmediata de las operaciones.

La convocatoria se realizó de manera virtual el 9 de abril, con invitación expresa a un grupo de compañías que han tenido participación directa o indirecta en el proceso concursal de la empresa radicada en Avellaneda, Santa Fe. Entre las invitadas figuraron firmas como ACA, Bunge, Viterra, Commodities, Unión Agrícola Avellaneda, Bioenergías Agropecuarias y otras de peso en el negocio exportador.

Según consta en el informe elevado por la concursada al juez del expediente, Fabián Lorenzini, la reunión contó con la presencia de representantes legales de algunas de estas compañías, aunque no así de los veedores judiciales designados por el magistrado concursal, quienes se excusaron por considerar que la naturaleza de la convocatoria excedía su función. El objetivo del encuentro era generar compromisos inmediatos que permitieran reanudar la actividad productiva y brindar algo de certidumbre a los trabajadores y a la comunidad local, fuertemente impactada por la parálisis de la firma. La premisa no se cumplió.

Pese a la urgencia planteada por Vicentin, los resultados fueron desalentadores. Representantes de Bioenergías manifestaron su preocupación por la continuidad de contratos ya existentes, sin avanzar en nuevos acuerdos. Por su parte, desde Commodities -firma interesada en el cramdown para terciar con una propuesta- aclararon que solo estaban allí para escuchar y que cualquier propuesta en firme sería considerada recién en la etapa de salvataje procesal, sin dar detalles sobre condiciones o plazos. Unión Agrícola Avellaneda, en tanto, confirmó que no tiene una oferta viable para afrontar la coyuntura actual.

Los llamados “interesados estratégicos” —ACA, Bunge y Viterra— se limitaron a ratificar que cumplirán con los contratos vigentes y los acuerdos definitivos una vez que se activen formalmente. Es decir, en la medida que se active el plan de pagos concursal que hoy está frenado en la Justicia. A partir de esa postura, no ofrecieron mecanismos alternativos que permitan la reactivación inmediata de las plantas.

De este modo, Vicentin cierra una nueva instancia de diálogo sin avances concretos, profundizando la incertidumbre sobre su futuro industrial y laboral. La falta de propuestas dejó expuesta la fragilidad del entramado de respaldo empresarial que supo tener la agroexportadora, hoy inmersa en un proceso concursal que no logra encaminar una salida productiva.

Este viernes, por otro lado, el juez de Reconquista Fabián Lorenzini es el que convocó a la empresa en default y otros actores para intentar una salida que permita reactivar las plantas del nodo sur y del norte. Vale recordar que Lorenzini ya se reunió esta semana con representantes de los gremios aceiteros y dicho cónclave no dejó más que incertidumbre sobre el futuro laboral del personal que sigue sin cobrar los haberes de marzo.