Fábrica se adaptó a la fuerza y concreta inversiones para sumar superficie

La industria proveedora de las fábricas de agromáquinas que hasta no hace tanto trabajaban con horas extras transitan un presente de reconversión ante el achicamiento de la demanda proveniente del campo. El fenómeno de la sequía que repercutió en una reducción de la producción de granos acotó el derrame y las fábricas que se mueven de acuerdo a las ventas del agro redefinieron la estrategia. Algo así ocurrió con Jorge Manes SA, metalúrgica que en Villa Gobernador Gálvez se las arregló para retocar el rumbo y hasta concretó un ambicioso esquema de inversión por u$s2 M.

La firma suma 50 años de trayectoria y en los últimos meses instrumentó un programa para enfocarse en el diseño y montaje de estructuras metálicas empleadas en la construcción de naves fabriles, un rubro que atendían en un porcentaje minoritario. “Hasta septiembre operábamos con turnos rotativos, fuerte carga horaria y un régimen orientado en un 80% a ser abastecedores de importantes compañías fabricantes de maquinaria agrícola. A partir de octubre de 2022 el panorama cambió y decidimos anticiparnos a la merma de operaciones”, describió Martín Manes, heredero de la firma familiar nacida para dar servicios de corte y plegado de chapa, una tarea que un sinnúmero de marcas de agromáquinas tercerizaba en tiempos de bonanza.

“Hoy operamos en un 10% para empresas ligadas a las agromáquinas y el resto de la capacidad productiva la estamos empleando para el desarrollo de estructuras metálicas. Trabajamos en vigas que salen de la planta terminadas, les sumamos toda la soldadura de los accesorios, por lo que el cliente se lleva a su terreno la estructura primaria completa del galpón”, sintetizó el empresario, en contacto con Punto biz.

En medio del volantazo para mantener la planta activa Jorge Manes SA continuó con un plan de inversiones que alcanzó los u$s2 M en una hoja de ruta que incluyó el fichaje de un lote frente al establecimiento original para edificar una nueva nave fabril y la construcción de un bloque de oficinas. 

“Estamos en un sector de Villa Gobernador Gálvez que es de uso industrial, aunque no se trata de un polígono, eso significa que para ampliarnos en superficie productiva hubo que adquirir un espacio cruzando la calle donde finalmente se levantaron 800 m2 de nave fabril por un lado, y en la parcela original de la empresa estamos terminando 750 m2 de oficinas”, enumeró Manes.

Vale aclarar que la compañía decidió apostar a continuar creciendo en el espacio que la vio nacer en Edison al 1300 en Villa Gobernador Gálvez, a pesar de contar con un terreno propio a la vera de la autopista Rosario - Buenos Aires. “Pensamos en los costos que significaba una mudanza hacia la autopista y al contar con la alternativa de adquirir el predio frente al establecimiento original decidimos quedarnos. Para el terreno en la zona rural hay otros proyectos”, indicó.

Aunque el grueso de la inversión se hizo con fondos propios, parte del desembolso se concretó gracias a los créditos Santa Fe de Pie, que se otorgaron vía el Banco Nación con tasa subsidiada por el Gobierno provincial. En particular fueron $55 M los otorgados a la empresa.