El empresario tech que quiere democratizar la industria del conocimiento

Punto biz festejó sus primeros 20 años con la realización de un documental, dirigido por el reconocido Héctor “Nene” Molina, que repasa en relatos la experiencia de 20 empresarios y emprendedores que marcaron el rumbo de los negocios en estas dos décadas. En esta oportunidad, Ignacio Sanseovich, director de Tecso, nos cuenta sobre la tecnología, la innovación y la ciencia. Mirá el video.

“Ante todo soy papá” se presenta Ignacio Sanseovich y sigue: “Ellos (por sus dos hijos) son los que cambiaron un poco el eje de prioridad de las cosas. Después de eso me dedico al mundo de la tecnología. Soy director de Tecso”. Y se refiere a la tecnológica que se dedica al desarrollo e implementación de software y tecnología que además tiene la particularidad de ser una cooperativa y que cuenta con oficinas en Argentina, Colombia, Estados Unidos y Europa.

La tecnología, la innovación y la ciencia son considerados por el también presidente del Polo Tecnológico como un espacio de desarrollo que genera muchas oportunidades. “Obviamente tiene que gustarte, -dice - pero tiene un muy amplio desarrollo profesional. Estaría muy piola que mis hijos puedan dedicarse a eso pero no los obligaría”.

Hay una cuestión de tener las cosas fáciles y de inmediato, que a veces es un acercamiento muy superficial y es una de las contras. Para Sanseovich, la generación que viene tiene un desafío en no dejarse llevar por las luces de lo inmediato, de lo rápido, de lo accesible, que si bien tiene beneficios pero considera esencial tener un espíritu crítico.

El joven empresario cuenta a Punto biz que dicta clases en dos universidades pero que le cuesta que lo llamen docente. Relata que le gusta “hacer sencillo el mundo digital”. Al respecto arroja un concepto: “A veces parece que la tecnología es para un nicho. Estoy un poco en contra de eso. Busco que la tecnología y la industria del conocimiento sean lo más democratizado y accesible posible”.

El avance de la Inteligencia Artificial

Ignacio Sanseovich dice que está de moda. En relación a la inteligencia artificial, menciona que la simple aplicación ya genera debates, cuestionamientos, y se pregunta: “¿Quién no habla sobre la ética y la moralidad vinculado con la inteligencia artificial? ¿Quién no habla de cómo afectan cuestiones tan básicas y tradicionales como la educación?”.

Y replica que “tampoco todo es inteligencia artificial”, sino que hay que saber discernir entre dónde se irá a aplicar, dónde realmente será un impacto, dónde seguirá funcionando tal como viene funcionando. “La ciencia ficción nos ha puesto un poco ese debate de la inteligencia artificial versus los humanos. Es como algo bastante de Hollywood, más que de lo que pueda pasar”, argumenta. Por último, sostiene que las distintas industrias hoy están trabajando en tener la capacidad de tener estructuras que sean flexibles, adaptables, con capacidad de leer y moverse y también cambiar rápidamente desde empresas hasta personas.

La cooperativa del software

“Somos un bicho raro en el ambiente porque Tecso siempre creció. Hoy somos unos 160 profesionales, todos asociados, no hay empleados, tenemos oficinas en distintos puntos de Argentina y en otros países, donde la propuesta es que nos juntemos aquellos que queremos trabajar en tecnología. Y nace desde el concepto cooperativo. Sus cuatro fundadores, dos personas de Buenos Aires, dos de Rosario, decidieron construir una organización con ese paradigma de que si nos va bien, nos va bien a todos, si nos va mal, bancamos la situación entre todos”, relata.

Así fue que hubo que empezar a formalizar procesos de incorporación, procesos empresarios, de contratación de proveedores, de búsqueda de clientes, “se empezó a gestar una empresa de forma democrática”, desde las autoridades que la dirigen, a la elección de cuánto se reparte y cuánto se capitaliza a fin de año por lo que producen entre todos.

El Polo Dentro del Polo Tecnológico hay una “diversidad tecnológica muy amplia”, hay empresas de biotecnología, de desarrollo de software, de telecomunicaciones, todo lo que tiene que ver con automatización y es una heterogeneidad muy grande también en tipos de tamaño de empresas. “Cubrimos un abanico muy amplio de posibilidades de generación de puestos de trabajo, de diversidad de productos y servicios, desde la propia oferta que pueden generar esas empresas y obviamente el Polo como institución en sí mismo”, explica su presidente.

Por último, reflexiona: “A veces nos quedamos mucho con el impacto económico que puede llegar a generar una empresa. A mí me gusta también pensar a la empresa como el motor de desarrollo social y el motor de desarrollo personal de las personas.