Campaña del oficialismo santafesino mantiene la lógica del cierre de listas

En el oficialismo la campaña no termina de arrancar. Las idas y vueltas durante el cierre de listas dejaron a la vista que la relación entre el gobernador Omar Perotti y el candidato que representará al oficialismo, el senador nacional Marcelo Lewandowski, no es la mejor. Y la campaña sigue la misma tónica: cada uno por su lado. A la estrategia electoral tardía producto de las indefiniciones, se le suma la aparición de nuevos sondeos que favorecen a la oposición. 

Hasta el momento se los vio poco juntos. Pese al acuerdo que ungió a Marcelo Lewandowski como el candidato del oficialismo para suceder a Omar Perotti en la Casa Gris, sus estrategias electorales van por caminos separados. Ambos parecen cómodos con esa lógica, sobre todo el periodista que todavía sostiene ciertas características de outsider y mantener distancia de la gestión actual puede darle margen político. En elecciones anteriores resultó útil; el tiempo dirá si es la mejor estrategia en esta oportunidad. 

El acuerdo a último minuto hacía suponer la existencia de alguna estrategia electoral conjunta que permita, principalmente, recuperar tiempo perdido: algunos candidatos de la propia interna, como Leandro Busatto, o de la oposición, como Maximiliano Pullaro, vienen recorriendo la provincia y trabajando desde el año pasado para llegar a la gobernación. En la lista oficialista las cosas arrancaron más tarde. 

Lewandowski demostró tener un caudal de votos más que interesante. Desbancó al socialismo de la senaduría por el departamento Rosario e hizo una elección más que aceptable en 2021, que le permitió acceder al Congreso de la Nación. Fortalecer y ampliar esa base es el objetivo. Por eso los esfuerzos se centran en relacionar la figura del senador con el nombre de la lista “Elijo Hacer”, más que en identificaciones partidarias o con referentes políticos. 

Asimismo, no es menor que el gobernador cuenta con la estructura para darle visibilidad a Lewandowski, especialmente en el norte de la provincia donde el periodista pisa menos fuerte que en el sur, donde su figura es más reconocida. No está tan claro si la misma lógica aplica a la inversa. Es decir, si compartir campaña con el senador podría ayudar a Perotti a mejorar su imagen en el sur santafesino, sobre todo en Rosario y las ciudades jaqueadas por la inseguridad. 

A pesar de todo, recientemente se los vio a ambos en la inauguración de la edición 29 de Agroactiva, en la localidad de Amstrong, compartiendo la parte protocolar del evento, donde Perotti cortó cintas y brindó un discurso. Si en el encuentro hubo intenciones de mostrarse juntos, la estrategia no fue del todo explotada: en sus redes sociales cada uno compartió fotos donde el otro aparecía, apenas, en un segundo plano. 

En el resto de los candidatos del peronismo, la estrategia electoral parece estar más clara. Tomando como referencia a Cristina Fernández de Kirchner, Marcos Cleri apela al “voto lealtad” y se muestra como el candidato del kirchnerismo en la provincia; mientras que Leandro Busatto busca distanciarse de la figura del gobernador, con la mirada también puesta en el voto kirchnerista, pero ampliada hacia sectores de centroizquierda. En tanto, la estrategia de Eduardo Toniolli parece más enfocada a la militancia territorial que caracteriza al Movimiento Evita y que se agranda a partir de la alianza con Ciudad Futura. 

En cuanto a los sondeos, Lewandowski es la figura que mejor mide del peronismo para la gobernación, aunque en términos individuales aparece debajo de Maximiliano Pullaro. La información proviene de una encuesta realizada por la consultora GyC Comunicaciones y difundida por los propios dirigentes de la oposición, beneficiados con los números. Allí el candidato de Unidos para Cambiar Santa Fe lidera con un 23,43%, seguido por el dirigente peronista con un 20,69%. Además, en la medición por partidos, la suma de votos de los candidatos opositores prácticamente duplica a los del peronismo.