Por aumento de la demanda, aerolínea extranjera suma vuelos desde Rosario

A partir del 5 de enero de 2026, la aerolínea Latam Airlines incrementará de tres a cinco las frecuencias semanales de su ruta directa entre Rosario y Lima, una conexión estratégica que no sólo acerca a los rosarinos con Perú, sino que también abre la puerta a decenas de destinos internacionales. El anuncio representa un paso firme en la recuperación del tráfico aéreo internacional de la terminal aérea de Fisherton, que busca volver a los niveles de operación previos a la pandemia.

El refuerzo de la ruta hacia Lima llega apenas seis meses después del regreso de ese vuelo, que había sido suspendido durante la crisis sanitaria del Covid-19. Desde el 1º de diciembre de 2024, Latam volvió a operar la conexión con tres frecuencias semanales utilizando aviones Airbus A319 y A320, y ahora redobla la apuesta por una demanda en crecimiento.

Con la nueva grilla, los vuelos partirán desde Rosario los lunes, martes, miércoles, viernes y domingos, saliendo a las 7.50 y llegando a Lima a las 10.00 (hora local). En sentido inverso, despegarán de Lima a las 00.05 para arribar a Rosario a las 6.05. Ambos tramos serán operados por Latam Airlines Perú. El horario elegido permite a los pasajeros aprovechar mejor las conexiones desde el hub limeño, una de las plataformas más importantes de la región.

Desde Lima, Latam ofrece conexiones con 17 destinos dentro de Perú y otros 25 internacionales en países como Colombia, México, Ecuador, Estados Unidos, Venezuela, República Dominicana, Costa Rica y Aruba. Para los viajeros del interior argentino, esto significa una puerta de salida al mundo sin necesidad de pasar por Buenos Aires.

La ampliación de frecuencias por parte de Latam se da en un contexto particular para el aeropuerto rosarino: por primera vez, la terminal cuenta con más vuelos internacionales que nacionales. Actualmente, de los 55 servicios semanales, 32 se dirigen al exterior y sólo 23 a destinos de cabotaje. El fenómeno se explica, en parte, por el tipo de cambio favorable que impulsa el turismo emisivo.