La fórmula de una conocida marca de aguas para aplicar prácticas sostenibles

En el marco del Día Internacional del Reciclaje, celebrado cada 17 de mayo, vale la pena destacar el rol que desempeñan las empresas para preservar y cuidar el medioambiente. Con su capacidad de influencia y recursos, las compañías de mayor fuste tienen la oportunidad de marcar la diferencia y promover prácticas sostenibles a gran escala. Del otro lado del mostrador, los consumidores y la sociedad en general demandan cada vez más acciones tangibles por parte de las empresas y esto incluye la implementación de programas de reciclaje efectivos.

Una de las marcas que ha tomado la iniciativa sobre esta temática es la firma de aguas Villavicencio. Se encuentra trabajando hace más de 10 años en el desarrollo e implementación de iniciativas ambientales y sociales que promuevan la circularidad de sus envases y contribuyan a la preservación del medioambiente. 

Uno de sus proyectos destacados es el programa de reciclaje inclusivo “Recuperadores", en colaboración con la Fundación Avina y Danone Ecosystem, que busca empoderar y mejorar la calidad de vida de los recuperadores urbanos, al mismo tiempo que se incrementa la tasa de recolección de envases y materiales reciclables. A través de este proyecto, al día de la fecha Villavicencio colabora con 53 cooperativas en 43 ciudades, generando un impacto positivo en más de 5300 recuperadores, beneficiando a más de 27.000 personas indirectamente y recolectando un promedio de 280 tn/mes de PET y 3400 tn/mes de material reciclable.

A su vez, la compañía cuenta con una estrategia de packaging que busca acelerar la transición global hacia una economía circular de envases, basándose en 3 pilares:

- Diseño de envases pensando en alternativas reciclables, reusables o compostables, con foco en utilizar el menor packaging posible

- Apoyo y promoción de programas de reciclaje y educación a consumidores.

- Fomento del uso de materiales que provengan de fuentes renovables. 

Villavicencio también apoya iniciativas que estén alineadas con el propósito, asociándose con distintos actores que impulsen prácticas cuyos objetivos estén enfocados en tener un impacto positivo en el medioambiente. Así ocurrió con su presencia en Mar del Plata durante toda la temporada de verano, promoviendo prácticas y educación ambiental como sponsor principal de la campaña "Playa Limpia", desarrollando un sistema de separación de residuos.

“Para Villavicencio el negocio y el cuidado ambiental van de la mano. Nos enfocamos en una perspectiva 360 que involucra una gestión responsable de todos los recursos, desde las personas que intervienen en nuestros procesos, hasta el agua que utilizamos, la energía, los proveedores y más. Creemos firmemente en el triple impacto, donde el beneficio económico se acompaña del cuidado del medio ambiente y la mejora social”, afirmó Diego Paramo, gerente de Marketing de Villavicencio en Aguas de Origen.

Estas acciones concretas demuestran cómo una marca puede ejercer una diferencia en la protección del medioambiente a través del reciclaje. Su compromiso no se limita a la producción de envases sustentables, sino que abarca todo el ciclo de vida de sus productos, desde la recolección hasta el procesamiento y la transformación en nuevos materiales.