Tras invertir u$s2 M, fábrica volvió a sumar m2 e inaugura antes de año nuevo

La metalmecánica Rossmet, con base en Venado Tuerto y especializada en plataformas para cosechadoras y repuestos agrícolas, acaba de completar un esquema de inversión que le permitió sumar 3.000 m2 productivos, incorporar una cabina de pintura en línea de 900 m2 y reforzar su parque de maquinaria. Se trata de un desembolso que asciende a u$s2 M ejecutados entre octubre de 2024 y septiembre de este año, según confirmó su titular, Santiago Rossi, en diálogo con Punto biz.

La ampliación de la nave —finalizada hace dos meses— será presentada formalmente en la despedida de año de la compañía. La superficie está íntegramente destinada a procesos de producción y montaje, no a almacenamiento. “Es una estructura que destinará al armado de maquinaria y a optimizar flujos productivos”, explicó el industrial, que subrayó que la firma viene con un crecimiento sostenido tanto en exportaciones como en demanda local.

En paralelo, Rossmet instaló una cabina de pintura en línea de 900 m2, que ya forma parte de la operación y representa un salto clave en calidad y eficiencia. A eso se sumó la incorporación de nueva maquinaria, fortaleciendo la capacidad de respuesta ante un aumento de pedidos que, según Rossi, se multiplicó tras su última participación en la feria internacional Agritechnica.

El empresario detalló que Rossmet triplicó la cantidad de contactos comerciales respecto de la edición anterior de la feria y ya proyecta expandir su cartera de clientes europeos. La estabilidad macroeconómica reciente también aparece como un factor que ayudó a mejorar la competitividad de la industria nacional de agropartes, especialmente frente a mercados exigentes como el europeo.

De cara al 2026, la compañía prepara otra apuesta fuerte: la robotización del área de soldadura. Rossi confirmó que ya están en tratativas con un proveedor y que antes de fin de año quedará cerrada la compra de cinco robots de soldadura, que se instalarán durante el próximo ejercicio. El proyecto demandará alrededor de u$s1 M y está orientado a mejorar procesos repetitivos y acortar tiempos de producción. La automatización alcanzará por igual a las líneas de repuestos y de plataformas, ya que la soldadura de ambos segmentos se encuentra integrada en un mismo sector fabril.

Las inversiones completadas y las proyectadas se explican por el volumen creciente de operaciones. Solo en la temporada anterior Rossmet cerró entre 6 y 7 negocios nuevos en Europa del Este y este año espera sumar al menos diez nuevos clientes del Viejo Continente. “Si entran más, se nos complica por capacidad; por eso aceleramos el plan de ampliación y automatización”, reconoció el empresario durante la conversación.

Con este paquete de inversiones, Rossmet consolida su estrategia de expansión internacional, profundiza su presencia en mercados como Estados Unidos, Sudáfrica y Australia, y busca terminar de establecerse en Europa, donde la calidad —según sostiene Rossi— continúa siendo el principal diferencial de la industria argentina.