Fábrica se sube a un negocio de gama premium con u$s5 M

La firma Bertotto Boglione, referente nacional en fabricación de tanques con base en Marcos Juárez, dio un paso fuerte en su plan de diversificación y se metió de lleno en el negocio de los acoplados cisterna de aluminio para transporte de combustibles. La compañía está a punto de habilitar la producción en serie de una nueva línea de equipos bajo licencia de la estadounidense Heil Trailer, movimiento que llega acompañado por un nuevo desembolso de u$s2 M que se suman a los u$s3 M invertidos inicialmente en la compra y puesta a punto de una planta que pertenecía a otra firma.

Con este último impulso, el paquete de inversiones trepa a alrededor de u$s5 M, sin contar el valor de la nave industrial. El monto incluye equipamiento específico para trabajar aluminio, adecuación integral de la planta, capital de trabajo y la incorporación de personal para montar la nueva línea de producción.

La apuesta se apoya en una nave fabril de unos 8.000 m2 que la empresa había adquirido tiempo atrás en Marcos Juárez y que durante todo el año pasado fue adaptada desde cero para fabricar cisternas de aluminio. A partir de enero de este año, Bertotto Boglione obtuvo la licencia de Heil Trailer –marca que concentra cerca del 70% del mercado de cisternas en Estados Unidos– para producir sus equipos desde Argentina.

“Nosotros teníamos la planta que habíamos adquirido unos años antes y durante 2024 hicimos una inversión para comenzar a fabricar con licencia Heil Trailer estas cisternas”, explicó a Punto biz la titular de la compañía, María Rosa Miguel, al detallar que el proceso arrancó con una etapa piloto que ya quedó atrás y que el objetivo es avanzar en 2026 a un esquema pleno de producción en serie.

El salto no es menor: hasta ahora, la empresa venía fabricando cisternas en acero al carbono, principalmente para minería y transporte de químicos, dentro de su línea tradicional. La nueva unidad apunta a un segmento premium: acoplados cisterna de aluminio para el transporte de combustibles, como los que utilizan redes de estaciones de servicio de YPF, Shell, Axion o Puma, entre otras.

La licencia obtenida con Heil Trailer convierte a Bertotto Boglione en el único fabricante de la marca en América del Sur, con permiso para abastecer a toda Latinoamérica. “Tenemos la licencia para todo Latinoamérica. Somos el único fabricante de Heil en América del Sur”, remarcó Miguel, al subrayar que los costos argentinos hoy resultan competitivos frente a las plantas que la misma multinacional posee en Estados Unidos y México, lo que abre una ventana clara para exportar desde Marcos Juárez a la región.

El impacto también se nota en el empleo. La nueva línea de cisternas de aluminio ya ocupa a unas 40 personas de manera directa y el plan de la empresa es escalar hasta 100 puestos solo para esta unidad durante el año próximo, sin contabilizar los servicios de ingeniería, logística y administración que aporta la estructura central. A eso se suma un pequeño equipo de tres personas radicado en Neuquén, dedicado a la puesta en marcha y servicio técnico de los equipos en Vaca Muerta y otras locaciones.

La jugada se apoya sobre una experiencia previa: desde 2015, Bertotto Boglione viene reconvirtiéndose para atender las exigencias de la cadena de valor de petróleo y gas, con fuerte presencia en Vaca Muerta. En esa década, la firma invirtió en infraestructura, certificaciones de procesos y soldadores, y en el desarrollo de un departamento de ingeniería capaz de diseñar equipos “a medida” según presión de trabajo, tipo de fluido y proceso de cada cliente.

En paralelo, la empresa también ganó terreno en minería, con provisión de soluciones de almacenamiento y transporte para proyectos de litio, cobre y oro en provincias como San Juan y Catamarca, donde los altos estándares de seguridad y calidad son condición de entrada.

El crecimiento en cisternas de aluminio no implica descuidar otros frentes. Miguel destacó que en la planta de Duraplas en Roldán –que Bertotto Boglione incorporó como capacidad ampliada para su negocio de polietileno– en los últimos dos años se trabajó en mantenimiento, mejora de procesos y puesta en valor de equipos. Y adelantó que hay un plan de modernización de maquinaria previsto para los próximos dos años, cuya velocidad de ejecución dependerá del retorno del crédito bancario a tasas razonables.

“Tenemos planes de renovación de nuestras máquinas y les tocaría a Duraplas entrar en ese plan. No se trata de cambiar el foco de la planta, sino de modernizarla”, señaló, al marcar que el nivel y el ritmo de las inversiones estarán atados a cómo se recomponga el financiamiento productivo luego de un año en el que, por tasas elevadas, el crédito prácticamente no existió.

El contexto sectorial tampoco fue fácil. Miguel, que también es socia en Metalfor, apuntó que 2024 no fue un buen año para la maquinaria agrícola porque el mercado está acostumbrado a operar con financiamiento bancario y esa herramienta estuvo prácticamente fuera de juego. Con todo, en la empresa confían en que una combinación de mejores tasas de interés y una buena campaña agrícola pueda reactivar la demanda y darle más volumen a la nueva línea de cisternas que, desde Marcos Juárez, se prepara para competir en toda la región.