Extorsiones, ataques y teorías conspirativas en la ciudad de la furia

La semana corta que pasó no dio respiro a los rosarinos. Otra saga de crímenes impactantes, víctimas inocentes, amenazas y ataques. Mientras, la política volvió a agitar teorías conspirativas para tratar de explicar el fenómeno por la cercanía del proceso electoral. Quienes ven manos negras por las inminentes elecciones no revisaron la estadística reciente: en 2022, año sin comicios, hubo en el departamento Rosario 288 asesinatos, la cifra más alta en una década. 

“La escuela está asumida como un medio de intimidación por la repercusión que genera un impacto de bala o una nota dejada en la puerta”. De esta forma, el responsable del Ministerio de Educación para el sur de Santa Fe, Osvaldo Biaggiotti, trató de explicar las razones por las cuales dos instituciones habían sido blanco esta semana de intimidaciones y ataques: la Gambartes de Paraguay al 1200 y la Ziperovich en Empalme Graneros.

No fueron casos aislados: en el primer cuatrimestre del año ya fueron una docena los colegios intimidados por bandas narco para dejar un mensaje mafioso. "Generan mucho temor y un clima de zozobra que no será fácil de superar", admitió el funcionario. 

El ataque a la escuela de Paso y Sabin volvió a dejar mal parada a la policía santafesina, más cerca del lado de ser parte del problema que de la solución. Allí había desde abril, cuando se produjo otro grave incidente, un móvil de la Unidad Regional II para custodiar a la institución y prevenir conflictos. El punto fijo no evitó el ataque y recién se enteró de la balacera a través del 911. 

Paradojas del funcionamiento policial en Rosario: tiene 140 móviles, 70 de ellos asignados a custodias. Pero los patrulleros estacionados en puntos fijo no están autorizados a perseguir potenciales atacantes y se convierten en espectadores de lujos de intimidaciones.

La saga violenta dejó a la escuela de Empalme sin clases. La Gambartes y su vecina, la Mariano Moreno, tampoco dictaron contenidos antes del doble feriado. Todo pese a estar lanzado el programa oficial “Te acompaño”, con móviles policiales circulando por medio centenar de colegios en zonas calientes.

Lejos de ser original, el poder volvió a ensayar teorías conspirativas. “Esto no es obra de un lunático encerrado en una habitación. No se trata de un loquito suelto, pero tendremos que convivir con esto mientras la justicia no pueda encontrar a los responsables de toda esta campaña”, planteó el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach.

Recién llegado de su gira por Egipto y Marruecos, el gobernador ratificó la línea argumental de su principal espada política en el gabinete. “No son casualidades algunas cosas, cada vez que hay un proceso electoral algunos hechos como estos recrudecen. Seguramente muchos piensan en volver a tiempos pasados, de más impunidad, que no están conformes en cómo estamos combatiendo el delito”, dijo Omar Perotti.

“No podemos permitir que un preso desde una cárcel defina si un chico va a la escuela o no, si un docente puede dar clases o no. Personas caminando balean una escuela que tiene custodia y no hay ninguna persecución. Amenazan una escuela y demora la investigación, pero mientras tanto la escuela cierra”, se quejó el intendente. 

Pablo Javkin empezó a levantar la voz contra la Casa Gris con mayor frecuencia e intensidad. Aunque sigue sin nombrar al gobernador en su confrontación, sabe que sus chances electorales dependen de diferenciarse de los responsables políticos de la gestión de seguridad en Rosario.

La gestión local también tiene sus flaquezas. El temporal que azotó a la ciudad entre miércoles y viernes dejaron a Rosario con decenas de árboles caídos y calles anegadas. Es cierto que llovió en 36 horas el doble que la media histórica del mes de mayo, pero Javkin hizo campaña en 2019 prometiendo ocuparse de los pequeños temas urbanos de los rosarinos tras años de abandono achacados a la gestión socialista.

Más allá de las elucubraciones políticas, la violencia no se detuvo en la mini semana laboral. El domingo un cadete de 45 años fue asesinado en Villa Gobernador Gálvez en la puerta de un local de hamburguesas. El fiscal que investiga el caso, Adrián Spelta, confirmó que la patronal para la que repartía el empleado estaba operando bajo extorsión y pagaba $200 mil por mes para funcionar sin sobresaltos.

El día del crimen, la empresa había pagado media hora antes los $200 mil. Pero un posible quiebre al interior del grupo delictivo o un reclamo de ajuste inflacionario del monto precipitaron el fatal desenlace. En resumen: los extorsionan, los obligan a pagar para estar “protegidos” e igualmente los matan.

La política santafesina volvió a mostrar así una enorme distancia entre sus prioridades, diagnósticos y soluciones y la realidad violenta. Una brecha cada vez más ancha que dificulta el comiendo de la campaña, las recorridas y los mensajes de ocasión.

La primera foto fuerte de la campaña santafesina fue en el acto por la revolución de Mayo en Santa Fe. Allí el gobernador se mostró por primera vez con su forzado candidato a sucederlo, el senador nacional Marcelo Lewandowski y su compañera de fórmula, la ministra de Infraestructura Silvina Frana.

Una postal que probablemente se repita con mucha periodicidad desde ahora y hasta el 16 de julio, jornada de las decisivas primarias santafesinas: Perotti mostrando en cada acto oficial a su candidato en el centro-norte santafesino, donde tiene bajo nivel de conocimiento y mucho por recorrer. El jefe de la Casa Gris se juega el liderazgo partidario en las Paso frente a las distintas fórmulas kirchneristas además de su candidatura para presidir una de las cámaras de la Legislatura provincial.

Mientras tanto, en menos de un mes cierran las listas nacionales para presidente y vice y los cargos legislativos en pugna: la mitad de la cámara de Diputados y un tercio del Senado. La definición. 

Santa Fe no tiene elección a senadores nacionales en este turno, pero renueva 10 de sus 19 bancas en la cámara baja y todavía ni han asomado posibles listas. Los nombres están atados a la definición de los armados nacionales para las categorías estrella. Y al remanente que dejó el frenético cierre de las Paso provincial, con 18 mil aspirantes ya anotados.