Exgerenta acusa a directores que la desvincularon del cargo

La ex gerenta del Centro de Corredores de Buenos Aires, Alejandra Parera, envió esta mañana una muy dura carta a las principales entidades cerealistas del país con  fuertes acusaciones a las autoridades del corretaje poteño que la apartaron del cargo. Misiva que tuvo alto impacto entre los directivos del Centro y este mediodía no se descartaba que el conflicto laboral escale.

"El 16 de abril el Centro de Corredores informó, a través de un escueto email, mi desvinculación de la entidad. Creo oportuno destacar que ello ocurrió aún antes de haber sido notificada de la misma", arrancó su carta que blanquea que la salida lejos estuvo de ser ordenada.

Enterado de la desvinculación, punto biz se comunicó con el titular del Centro porteño, Mario Marincovich, quien aseguró que la desvinculación de Parera “ocurre dentro de un proceso de reestructuración interna en el que la ingeniera no se sintió a gusto y tampoco mostró voluntad de querer ajustarse". Este medio publicó la nota el 24 de abril. Punto biz intentó comunicarse con Parera para conocer su opinión, pero no respondió a los mensajes. Hasta esta mañana que la ex ejecutiva difundió su posición entre ejecutivos y entidades del sector.

"Con motivo de la nota publicada el pasado 24 de abril, que fuera concedida por quién ejerce actualmente la presidencia del Centro, donde expresa que mi desvinculación se produce por mi negativa o incapacidad para acompañar un proceso de reestructuración y cambios, siento la necesidad de hacerles saber que ello es falso. Jamás me negué a ningún cambio, porque jamás se me notificó que la Comisión Directiva tuviera intención de realizar reestructuración alguna. Mal podía yo acompañar un proceso de cuya existencia me entero dos días después de haber sido despedida, y a través de un portal de noticias", concluye la nota enviada, en la que también da cuenta de que recibió muchas palabras de apoyo del entorno cerealista.

Las declaraciones de Parera corrieron como reguero de pólvora entre cerealistas, incluso de Rosario, Santa Fe, Córdoba y Bahía Blanca. También tuvieron alto impacto entre directivos de la entidad y no se descarte que el conflicto laboral escale.